El 33.4% de personas que se encuentran ocupadas en el país lo están en condiciones críticas de empleo, esto es 19 millones 873,000 trabajadores que bien o tienen un salario por debajo del mínimo o trabajan más de 40 horas para obtener un ingreso más alto.
María del Pilar Martínez
El 33.4% de personas que se encuentran ocupadas en el país lo están en condiciones críticas de empleo, esto es 19 millones 873,000 trabajadores que bien o tienen un salario por debajo del mínimo o trabajan más de 40 horas para obtener un ingreso más alto.
Es decir, “contabiliza a las personas que trabajan menos de lo que desearían más a las personas que trabajan con ingresos precarios y a aquéllas que trabajan muchas horas, amén de contar con una remuneración baja”.
Así lo revelan los datos del tercer trimestre del Inegi, en donde destaca a entidades como Chiapas que es la que tiene al mayor número de personas con una ocupación en condiciones críticas con niveles de 49.1%, le siguen Tlaxcala, con 44.1%; Puebla (41.5%); Veracruz, con 39.1%, Estado de México y Tamaulipas, con 38.9 por ciento.
Si bien, Chiapas no se encuentra en los lugares con las más altas tasas de desocupación, sí reporta al mayor número de personas que perciben salarios bajos.
Cabe destacar que, tomando como base el salario mínimo equivalente de enero 2024, el INEGI informó que en 2018 en el mismo periodo la tasa de condiciones críticas de ocupación era de 41.8%; y reportó que los más altos niveles se registraron en 2020 con 42.4% y desde entonces ha venido disminuyendo casi 10 puntos porcentuales al tercer trimestre de 2024.
Considerando el género, los hombres reportan una tasa de 36.2%; mientras que para las mujeres es de 29.3 por ciento.
Al respecto, Alfonso Bouzas, coordinador del Observatorio Laboral, comentó que “la tendencia a la precarización del trabajo se inició en los 80, y a la fecha todavía no se ha visto modificada de manera significativa. El sector informal sigue creciendo, y, en términos generales, vivimos un escenario en donde se reduce de manera significativa los espacios laborales, en muchos casos, como consecuencia de cambios tecnológicos, y en otros también por una política empresarial”.
Además, el INEGI detalló que aún hay en el país 17 millones 67,000 personas que no tiene acceso a las instituciones de salud, y a la vez que hay 13 millones 121,000 trabajadores que no cuenta con prestaciones laborales, estos son distintos al acceso a la salud, puede ser vacaciones o pago de vales de despensa o bonos por desempeño mismos a los que no tienen acceso.
Por otra parte, el mercado laboral mexicano, en los meses de julio a septiembre, reportó que no se ha otorgado contrato por escrito a la totalidad de los trabajadores, pues si bien 23 millones 571,000 lo recibe por escrito; hay 3.3 millones de trabajadores que son temporales; 20 millones con un tipo de contrato que es de base o tiempo indefinido; mientras que sin contrato por escrito hay 16 millones 714,000 personas.
Comparado con un año antes en el mismo periodo, se sumaron 904,931 personas a un contrato por tiempo indefinido, mientras que se redujo 151,021 personas que no firmaron un contrato a la hora de emplearse.