El 2 de mayo de 2017, soldados y agentes federales detuvieron a Dámaso López padre, El Licenciado. El 7, Javier Valdez publicó un artículo satírico sobre Dámaso López hijo, El Minilic. Escribió que “era bueno para el cotorreo, no para los negocios, sólo bebe las mieles que siembra y cosecha, o cosechaba, su padre; es un narco de corridos por encargo, pistolero de utilería”. Satírico y mortal. El 15 de mayo ejecutaron a Javier en el centro de Culiacán, su ciudad. Allá sí supieron quién fue y por qué: los sicarios de un pistolero de utilería enfurecido por lo que el periodista publicó. Dos meses después de la ejecución de Javier, con el alegato de que los hijos de El Chapo estaban por matarlo, El Minilic se entregó en Estados Unidos. Seguramente por hacer bien el trabajo de delación, en septiembre de 2022 El Minilic obtuvo la libertad condicionada. Pero como a tantos sinaloenses en este segundo semestre, la suerte se le volteó. El viernes lo detuvieron allá por cargos relacionados con el fentanilo y otras drogas. Ayer el fiscal Gertz insistió que México lo quiere aquí, “porque él es el autor intelectual del asesinato del periodista Javier Valdez”. Imposible no acompañar a la FGR en esta reivindicación. En donde estés, salud, Javier.