DIARIO PRESENTE
- La Secretaría de Marina-Armada de México (Semar), ha implementado innovadores sistemas de monitoreo y vigilancia en el Alto Golfo de California, específicamente en las zonas de San Felipe y Puerto Peñasco, como parte de sus esfuerzos para proteger a la vaquita marina, una de las especies marinas más amenazadas del mundo.
Estos avances tecnológicos, diseñados y desarrollados por el área de Investigación y Desarrollo de la Armada de México, están transformando la manera en que se vigilan las áreas marítimas y se combate el tráfico de drogas.
- De acuerdo con el Capitán de Navío Juan Francisco Robles Camacho, Director de Investigación y Desarrollo de Sistemas de Comunicaciones y Detección de la Armada de México, se han instalado sistemas de radar y visión por computadora en la región, los cuales permiten una vigilancia constante de la fauna marina en peligro, así como el tráfico marítimo.
“En el Alto Golfo de California hemos instalado varios sistemas principalmente son sistemas de radar y sistemas de detección por visión por computadora, esto principalmente es para la protección de nuestras especies marinas mexicanas en peligro de extinción, principalmente la vaquita marina, pero también para la vigilancia del transporte marítimo que existe en la región y también para el cuidado de las embarcaciones recreativas”.
Además de proteger a la vaquita marina y otras especies marinas en peligro de extinción, la tecnología instalada en el Alto Golfo de California también tiene un impacto significativo en la lucha contra el crimen organizado.
La zona es conocida por ser un punto crítico para actividades ilícitas, como el tráfico de totoaba, cuyas vejigas natatorias son altamente cotizadas en el mercado negro internacional, el monitoreo constante y la capacidad de respuesta rápida permiten a la Semar interceptar embarcaciones utilizadas.
Estos sistemas no solo permiten la protección de la vaquita marina, sino que también ayudan a monitorear la pesca ilegal y las actividades del crimen organizado que pueda estar en el llamado polígono de protección.
- Este proyecto, se desarrollo en aproximadamente ocho años, lo que marca un hito en la protección de las especies marinas en peligro de extinción en México con la combinación de radares, inteligencia artificial y sistemas de comunicación avanzada no solo se protege a la vaquita marina, sino que también refuerza la seguridad en las costas mexicanas frente a actividades ilegales.
La tecnología de punta en el Alto Golfo de California
Los radares diseñados y utilizados por Semar tiene un alcance de 120 kilómetros, lo que permite una cobertura amplia de la zona marítima del Alto Golfo de California, este tipo de radar está diseñado específicamente para operar en condiciones marítimas difíciles, como niebla, tormentas o incluso en la oscuridad total.
Además, es capaz de detectar embarcaciones menores, un tipo de tráfico difícil de monitorear con tecnologías convencionales, y alerta en tiempo real sobre su presencia en áreas.
Una de las más innovaciones significativas es la integración de un sistema de visión por computadora que utiliza redes neuronales para procesar las imágenes capturadas por las cámaras.
Este sistema puede identificar hasta 80 tipos diferentes de objetos, desde embarcaciones hasta posibles redes de pesca ilegal, gracias a la inteligencia artificial, el sistema puede hacer una clasificación automática, alertando sobre actividades sospechosas, como la pesca ilegal dentro de las zonas protegidas
Los datos generados por el radar y el sistema de visión por computadora no son tratados de manera aislada, se integran a una red de datos tácticos que permite compartir la información con diversas unidades en tiempo real.
Esta red conecta a las unidades de vigilancia aérea, naval y terrestre, lo que garantiza que cualquier amenaza detectada en el mar pueda ser abordada rápidamente desde varios frentes.
La información también se envía a un sistema central de mando y control, que coordina las operaciones en tiempo real y asegura una respuesta efectiva ante cualquier
- Uno de los retos más grandes para la vigilancia marítima es operar en condiciones de baja visibilidad, especialmente de noche, por lo que estos sistemas de detección implementados por la Armada de México operan sin necesidad de luz, utilizando tecnologías de infrarrojos y sensores térmicos para asegurar que la vigilancia se mantenga activa las 24 horas del día, los 7 días de la semana.
“Estos sistemas trabajan día y noche, no necesitan luz para poder hacer la detección y con esto podemos llevar un control y una vigilancia completa a las 24 horas del día, los blancos que son detectados son integrados a otros sistemas que ya tiene la secretaría de marina, como son una red de datos tácticos y también una un sistema de mando y control en el cual ese blanco inmediatamente lo tienen a nivel central y también todo lo tienen todos los mandos navales y las unidades tanto de superficie aérea y Tierra que estén dentro de esa área geográfica y si es necesario tienen esa ubicación para poder ir a atender la emergencia o hacer la detección de esa embarcación”, aseguró el Capitán de Navío Juan Francisco Robles Camacho.
Esto es crucial en áreas de protección como el hábitat de la vaquita marina, donde las actividades ilegales suelen ocurrir durante la noche. Los sistemas de radar y visión están respaldados por embarcaciones tipo Defender, de gran maniobrabilidad y rapidez, ideales para interceptar pequeñas embarcaciones que podrían estar involucradas en actividades ilícitas.
Las aeronaves Spartan y patrullas oceánicas brindan apoyo desde el aire, mejorando la capacidad de respuesta y monitoreo en zonas más amplias. Estos vehículos aéreos y marítimos permiten una respuesta rápida a cualquier incursión no autorizada en áreas protegidas.
- Lo más destacable de este proyecto es que los sistemas fueron diseñados y desarrollados por la propia Unidad de Investigación y Desarrollo Tecnológico de la Armada de México, esta innovación representa un avance importante para el país, ya que no solo asegura una protección adecuada de las especies en peligro, sino que también fomenta el desarrollo de tecnologías nacionales con aplicaciones tanto en la seguridad como en la preservación del medio ambiente.
Con el éxito de los sistemas de monitoreo en el Alto Golfo de California, la Semar podría expandir esta tecnología a otras áreas críticas del país donde la pesca ilegal y el crimen organizado amenazan tanto la biodiversidad como la seguridad nacional.