“Crecí en Tucson donde mi papá trabajó como conductor de autobuses de la ciudad para darnos a mis hermanas y a mí la oportunidad del sueño americano”, expresó Juan Ciscomani, el primer inmigrante mexicano elegido para la Cámara de Representantes por el sexto distrito de Arizona, durante la réplica republicana al discurso del Estado de la Unión del presidente Joe Biden a comienzos de 2023. Sobre su padre, el político nacido en Hermosillo, México, añadió: “Nos enseñó amor y respeto hacia nuestro país. Nos demostró que con determinación y trabajo duro, no hay límites en esta gran nación”. El momento fue cumbre para el congresista por la proyección nacional que le dio siendo un recién llegado a Washington, pero también fue una abierta declaración de intenciones: arrancó su discurso en español y se posicionó en contra de la Administración de Biden, enviando así un claro mensaje al electorado latino que como él discrepa del demócrata.
En los siete minutos y cuarenta y seis segundos que duró su discurso, Ciscomani aprovechó para descargar su retahíla contra el partido azul. “El presidente Biden quiere decirnos que todo está de maravilla, pero por qué no nos sentimos de maravilla. El sueño americano parece inalcanzable y el presidente sigue sin ejercer liderazgo, sin presentar remedio viable”, decía al referirse al manejo de la economía y el desempeño de la Casa Blanca en el control de la frontera sur. Desde su llegada al Capitolio en 2022, Ciscomani se ha convertido en el representante de la voz más conservadora de los latinos en Estados Unidos. Sobre la inmigración, uno de los temas claves para la comunidad latina, el mexicano-estadounidense se ha posicionado firmemente en contra de la vía irregular. De hecho, en el pasado ha abogado porque se desplegara la Guardia Nacional en Arizona para frenar el flujo de inmigrantes cruzando desde México y ha pedido que se complete la construcción del muro en la frontera sur iniciada durante la presidencia de Donald Trump.
El congresista apoya firmemente al candidato republicano a las elecciones del próximo noviembre. “El presidente va a entrar con una energía diferente a la primera vez. Ya sabe donde se está metiendo, los intentos de atacar la elección… Todo tipo de ataques que vienen, pero él estará preparado y actuará inmediatamente”, dijo sobre el expresidente recientemente.
Por lo tanto, quizá no sorprenda que Ciscomani haya sido acusado de estar vinculado a un grupo de extrema derecha. La revelación llegó en el contexto de las primarias republicanas de Arizona que se llevarán a cabo este julio, en las que el representante hispano aspira a la reelección. Todo indica que Ciscomani será reelegido y se enfrentará por segunda vez a la demócrata Kirsten Engel, cuya campaña fue quien reveló, en un video que puede verse en línea, la trayectoria de su oponente con The Patriot Academy (también conocida como Fundación Antorcha de la Libertad), una organización de extrema derecha. Según evidenció el equipo de Engel, en un texto firmado en agosto de 2010, el propio Ciscomani confirmó su vínculo con una entidad que sostiene que la separación entre la iglesia y el Estado es un “mito”, se muestra a favor de reescribir la Constitución para declarar a Estados Unidos una “nación cristiana” y niega el cambio climático. “Puedo decir de todo corazón que nada en mi vida me ha dado una dirección más clara que Patriot Academy, y no soy el único exalumno que piensa así”, declaró el congresista en dicho escrito.
La campaña de Engel denuncia no solo que Ciscomani formó parte de la junta directiva de Patriot Academy desde 2007 hasta enero de 2021, también de llevar el grupo a Arizona y promover la enseñanza a jóvenes estudiantes de que el país está al borde del “comunismo” sin Dios. Esta organización imparte clases de formación política sobre “los valores bíblicos de la Constitución”, simulacros de sesiones legislativas y cursos de “defensa constitucional”, entrenando a adultos y niños en el uso de armas de fuego para la defensa del nacionalismo cristiano. Estos incluyen clases de tácticas con armas de fuego, cursos de rifle y escopeta y, en algunos casos, cursos de arco y flecha.
Ciscomani aún no responde a los señalamientos de Engel ni a las evidencias que lo vinculan a esta organización, pero sí ha dado muestras de sobra sobre el peso que tiene la religión en sus opiniones sobre temas como el aborto o el matrimonio entre personas del mismo sexo. “Mi mamá con su ejemplo, siempre orando y recordándonos que sin fe para qué estamos aquí. Con fe todo es posible”, afirmó durante la réplica republicana al discurso del estado de la Unión. Según su página web para la reelección, el congresista “está a favor de la vida, con excepciones en caso de violación, incesto y protección de la vida de la madre”. Su Estado, Arizona, tiene una de las leyes contra el aborto más restrictivas del país. Impide a las mujeres abortar inclusive tras una violación o el incesto, no toma en consideración complicaciones en el embarazo, y solo permite una excepción cuando la vida de la madre está en peligro o corre el riesgo de sufrir un daño significativo.
Un ascenso meteórico hasta Washington
Casado, con seis hijos y titulado en la Universidad de Arizona, Ciscomani es de los que combina trajes con tenis en sus redes sociales para quitarse la imagen fría y anticuada de los políticos de Washington. Sus inicios como servidor público se remontan al año 2015, cuando a las órdenes el ex gobernador de Arizona, Doug Ducey, fue nombrado director de la oficina del sur del Estado, con siete condados a su cargo. Posteriormente, fue asesor principal del despacho de Ducey y estuvo al frente de la Comisión Arizona-Sonora, que promueve el intercambio comercial entre México y Estados Unidos.
En 2022, con 41 años, ganó la nominación republicana en las primarias para competir por el curul del sexto distrito congresional de Arizona. Se hizo con el puesto en el parlamento en las elecciones del 8 de noviembre por una diferencia de poco más de cinco mil votos. Su rival entonces y probablemente este año otra vez, la demócrata Kirsten Engel, sacó 171.969 boletas (49.2%) y él 177.201 (50.7%).
Durante sus primeros 100 días en el cargo, Ciscomani participó en 59 proyectos de ley aprobados, envió otros cinco a la Casa Blanca, de los cuales tres se convirtieron en ley, publicó la cadena Univision. También fue el primer novato en ser nombrado en el comité de apropiaciones del Congreso de Estados Unidos, y miembro del Consejo Asesor de Ciudadanos bipartidista, conformado por un republicano, un demócrata y un independiente. “Ningún lado va a obtener todo lo que quiere (…) Dentro del propio partido republicano hay diferentes opiniones sobre cómo llegar a ciertos puntos”, destacó durante una entrevista con el medio conservador Americano Media.
Sobre los temas medulares para la comunidad latina como la economía o la migración, se muestra a favor de la cobertura del seguro social y Medicare, pero fue muy crítico con el fin del Título 42 por parte de la Administración Biden, una medida que catalogó como “pésima”. También se opuso rotundamente a las afirmaciones del Secretario del Departamento de Seguridad Interna (DHS), el cubano estadounidense Alejandro Mayorkas, al afirmar que Estados Unidos tiene entre 10 y 11 millones de vacantes de trabajo para personas que huyen de la pobreza, en abierta alusión a la inmigración irregular. “Mandan este tipo de mensaje, de decir vengan y háganlo de una manera peligrosa e ilegal. Ese es el problema (…) ¿Hay vacantes? Claro que sí hay. Nuestra comunidad de migrantes son muy buenos trabajadores en cualquier nivel, desde ingenieros hasta empleados de servicio. Claro que hay una fórmula ahí, pero hay un proceso para hacer eso”, declaró a Univision.
Ciscomani también habló en los medios sobre la necesidad de invertir en infraestructura y tecnología para prevenir el tráfico de drogas y la explotación del tráfico humano en la frontera. De hecho, denunció que la sobredosis de fentanilo era ya la principal causa de muertes de jóvenes en el sexto distrito de Arizona, superando los accidentes automovilísticos, pero su partido boicoteó no una, dos veces, el acuerdo bipartidista en el Congreso que buscaba reformar las leyes de inmigración en el país y conseguir un mayor financiamiento (20.000 millones de dólares) para el control de los dos temas que tanto preocupan al congresista. La petición de Trump de bloquear la medida pudo más.
Contra todo pronóstico, este tipo de discurso antinmigrante, antiaborto, anti derechos LGBT+, ha ido cobrando fuerza entre los latinos. “Nuestra comunidad es conservadora, con valores de familia y trabajo”, ha remarcado en los medios el congresista mexicano que apoya la reelección de Donald Trump y su lema Make America Great Again (MAGA). Una nueva encuesta de CBS News y YouGov demuestra el contexto actual de los latinos cuando el 53% de los consultados se muestra a favor de una deportación masiva de inmigrantes irregulares. Ciscomani es solo uno entre millones.