La secretaría de Gobernación instó a los legisladores a honrar los principios de la Cuarta Transformación y a impulsar una reforma electoral transparente.
Redacción
Durante la reunión plenaria de los diputados de Morena, la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, hizo un llamado de atención sobre el respeto a la austeridad, enfatizando que este principio no es un eslogan, sino un valor central del gobierno y del movimiento que fundó el partido oficialista.
Rodríguez reiteró las palabras de la presidenta Claudia Sheinbaum, señalando que “la austeridad es una filosofía de vida que se opone frontalmente al despilfarro y a los lujos del pasado”, e instó a los legisladores a actuar con honestidad, compromiso y resultados en favor de la ciudadanía.
La funcionaria recordó que millones de mexicanos han respaldado a Morena y que los representantes populares deben honrar ese apoyo, evitando conductas ostentosas que contrasten con los principios del partido. Entre los legisladores señalados por su estilo de vida lujoso se encuentra Sergio Gutiérrez Luna, presidente de la Mesa Directiva, cuya vida acomodada ha generado críticas en contraste con los salarios promedio del país.
Otros casos recientes de funcionarios o legisladores de Morena con gastos elevados incluyen a Gerardo Fernández Noroña, quien adquirió una residencia en Tepoztlán de más de 12 millones de pesos, y Andrés Manuel López Beltrán, que viajó a Japón durante la plenaria del partido. También se reportaron viajes al extranjero de Layda Sansores, Ricardo Monreal y Fernández Noroña en primera clase, lo que ha reavivado la discusión sobre la coherencia entre discurso y práctica.
Rosa Icela Rodríguez además subrayó la importancia de la reforma electoral que se discute en el Congreso, considerándola una “necesidad histórica” para fortalecer la transparencia, garantizar elecciones libres y terminar con la complicidad entre poder político y económico que caracterizó al antiguo orden.
Finalmente, la secretaria reiteró que la transformación democrática requiere del compromiso de los legisladores para aplicar los principios de austeridad y transparencia, siguiendo el ejemplo de la presidencia de Sheinbaum, que ha insistido en que el poder debe ejercerse con humildad y en función del bienestar de la ciudadanía.
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