Hermosillo, Son. Cientos de usuarios afectados por apagones en plena temporada de calor extremo hicieron un llamado urgente a las autoridades estatales y federales para que el acceso a la energía eléctrica quede establecido en la Constitución como un derecho humano. La exigencia se planteó durante un mitin realizado en el Jardín Juárez, donde ciudadanos a través de la Unión de Usuarios de Hermosillo, denunciaron que la falta de suministro no solo afecta la vida cotidiana, sino que pone en riesgo la salud y la vida de la población más vulnerable.
La protesta surge en un contexto crítico para Sonora, que este verano se convirtió en la entidad con más muertes asociadas a las altas temperaturas en el país: 20 defunciones confirmadas y cerca de 300 personas con afectaciones a la salud, según cifras oficiales de la Secretaría de Salud estatal. Solo en lo que va de la temporada se reporta un promedio de dos muertes semanales por golpes de calor y deshidratación, principalmente en Hermosillo, Caborca y San Luis Río Colorado, donde las temperaturas han superado récords históricos de hasta 48 grados.
En los últimos días, habitantes de colonias populares del norte y sur de Hermosillo denunciaron apagones que se prolongaron por más de 24 horas, obligándolos a bloquear calles y levantar pancartas para exigir a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) una solución inmediata. Las interrupciones en el servicio se han atribuido a transformadores sobrecargados, explosiones de equipos eléctricos y bajones de voltaje que dañan electrodomésticos. Aunque cada verano se registran fallas, vecinos y organizaciones sociales coinciden en que este año la situación ha empeorado.
Ignacio Peinado Luna, dirigente de la Unión de Usuarios, explicó que la movilización se organizó tras semanas de quejas sin respuesta por parte de la CFE. Aseguró que las familias afectadas enfrentan pérdidas económicas por alimentos y medicamentos descompuestos, además de tener que abandonar sus hogares durante las noches en busca de lugares con aire acondicionado para proteger a personas mayores, bebés y pacientes con enfermedades crónicas.
“La energía eléctrica es indispensable para garantizar la vida en una región como Sonora, donde el calor extremo representa un riesgo permanente. No puede seguir tratándose como un servicio opcional, debe estar garantizado como un derecho humano”, subrayó Peinado Luna en el mitin.
El llamado al Congreso local y federal, así como al gobierno federal busca que se legisle en materia constitucional para que el acceso a la electricidad sea reconocido como derecho fundamental, equiparable al agua y a la salud. Los manifestantes destacaron que, mientras no exista un marco legal que obligue a garantizar el servicio, las familias seguirán padeciendo las consecuencias de la ineficiencia y la falta de inversión en la infraestructura eléctrica.
La marcha-mitin concluyó con el acuerdo de mantener la presión social hasta que las autoridades federales den respuesta, en medio de una de las olas de calor más severas registradas en la historia de Sonora.
ENLACE: La Jornada – Marchan cientos en Sonora para exigir energía eléctrica como derecho humano