La cara visible de la lucha en tribunales contra la reforma judicial, Nancy Juárez Salas, ha tenido denuncias y muestras de apoyo de su gremio.
Oscar Balderas
El Poder Judicial en México es un gremio de bajo perfil. Las fotografías de jueces no suelen aparecer en los directorios públicos; tampoco suelen dar entrevistas; por eso, la jueza Nancy Juárez Salas se ha convertido en una rareza: muchas prefieren la discreción, ella ha elegido los reflectores para retar a la presidenta Claudia Sheinbaum.
La jueza Juárez Salas dio un salto bajo el foco nacional el 17 de octubre, cuando plantó un ultimátum a la presidenta de México: o eliminaba del Diario Oficial de la Federación (DOF) la publicación sobre la reforma al Poder Judicial en 24 horas o enteraría al Ministerio Público Federal que Claudia Sheinbaum había cometido el delito de desacato, castigado hasta con siete años de prisión.
¿Qué le respondió Sheinbaum a la jueza?
La morenista hizo un movimiento de defensa y contraataque: no sólo no bajaría la publicación —lo cual ha cumplido hasta el momento—, sino que denunciaría a la jueza ante el Consejo de la Judicatura Federal (CJF) por realizar un emplazamiento sin sustento jurídico, lo que se puede sancionar hasta con su inhabilitación. Ambas pusieron en juego su cargo: la banda presidencial o la toga y el birrete.
No es la primera vez que el puesto de la jueza Nancy Juárez Salas está en riesgo. Fuentes dentro del Poder Judicial contaron a MILENIO que, en abril de 2021, el pleno del CJF ordenó su suspensión tras las denuncias en su contra de 12 servidores públicos. Sin embargo, en marzo de 2023, la suspensión fue revocada y volvió a su puesto.
Ese castigo fue el resultado de tres investigaciones: la J/339/2021 que atribuyó a la juzgadora federal conductas negativas como desempeño deficiente, incumplimiento del horario de trabajo, nepotismo, acoso laboral y no respetar el derecho a la inamovilidad de los trabajadores adscritos a su órgano jurisdiccional.
En la investigación J/322/2021 a la jueza se le imputó falta de profesionalismo y en la J/245/2021 se le acusó de la misma falta, además de abusos de funciones y acoso laboral.
Esa tampoco es su única sanción. La jueza fue sometida al procedimiento disciplinario 13/2022 por conductas como hostigamiento laboral —derivado de malos tratos o trato inadecuado hacia los servidores públicos denunciantes—, otorgar privilegios al personal que ella contrató, horarios excesivos de labores derivado de la forma de trabajo que implementó.
Así como instaurar procedimientos administrativos disciplinarios de manera arbitraria.
Su récord de mala conducta inició, al menos, en octubre de 2016, cuando estuvo sujeta al procedimiento disciplinario 37/2015 por la ratificación irregular de licencias médicas y por lo cual se le impuso una sanción administrativa.
Las fuentes consultadas aseguraron que, además de las sanciones que están en los registros oficiales, son conocidas las amonestaciones verbales contra la defensora del Poder Judicial por faltas que van desde irregularidades en la expedición de nombramientos y descuido en el desempeño de sus funciones hasta realizar actividades comerciales ajenas a la función jurisdiccional, un acto prohibido en los códigos éticos de cualquier juzgador.
A todo se le suman los señalamientos de irregularidades en la tramitación de juicios orales mercantiles:
- 79/2020
- 134/2020
- 334/2020
- 638/2012
- 707/2019
- 788/2019
- 774/2020
- 574/2017
- 1059/2019
- 479/2018
- 675/2019
- 688/2020.
A pesar de este registro negro, la jueza adscrita al Juzgado Décimo Noveno de Distrito en Coatzacoalcos, Veracruz, se ha convertido en la líder de un sector de trabajadores del Poder Judicial que afirman que las reformas aprobadas por la mayoría de la Cámara de Diputados y del Senado atentan contra sus derechos laborales y la autonomía entre los Poderes de la Unión.
Protestan en Veracruz por reforma judicial
El domingo 20 de octubre, decenas de personas marcharon en la capital veracruzana y bloquearon las principales avenidas del centro de la ciudad en defensa de la juzgadora federal y trabajadores del Poder Judicial, a quienes le dedicaron sus consignas:
“¡En apoyo a la jueza de distrito Nancy Juárez Salas!”, se leía en varias cartulinas que sugerían las etiquetas digitales #ClaudiaEnDesacato o #TodosSomosPJF, donde también se concentra el respaldo a la abogada.
Nancy Juárez Salas es el rostro público de la batalla contra la primera gran reforma constitucional de la presidenta Claudia Sheinbaum, quien ha insistido en que ningún juez tiene el poder suficiente para anular la publicación en el DOF de una reforma constitucional votada por el Poder Legislativo.
Así lo ha asumido en la calle y en su despacho. En el puerto de Veracruz, la jueza Nancy Juárez Salas rompió los protocolos del Poder Judicial y encabezó las movilizaciones callejeras contra los cambios legales, y reafirmó su rechazo en su escritorio al firmar la suspensión provisional de la reforma, lo que, en teoría, evitaría su puesta en vigor.
Su arribo al Poder Judicial está fechada en marzo de 2010 y desde entonces ha escalado distintas posiciones, como ser actuaria judicial, oficial judicial y laborar en el Juzgado Primero de Distrito en Materia Penal en el Distrito Federal. Catorce años después busca ser la primera jueza en la historia de México que amague con llevar a prisión a la primera presidenta del país.
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