Bien recordará Usted, buha lectora, universitario lector, que hace algunos despachos le informaba de la calificación reprobatoria de la cuenta pública de la Universidad de Sonora, nuestra alma mater, dada a conocer en el informe de resultados que el Instituto Superior de Auditoría y Fiscalización (ISAF) envió al Congreso del Estado.
Prometí buscar la causa de tal calificación y aquí le dejo lo que encontré. En primer lugar, no hay motivo de alarma, me cuentan. Nada tiene que ver con un manejo insano de los recursos que aporta el Estado y la Federación para el sostenimiento de nuestra máxima casa de estudios. Para nada. Si algo presume nuestra querida universidad es que siempre se ha manejado con “números negros”, a diferencia de muchas universidades en el país que arrastran deudas y señalamientos de mal manejo de sus finanzas.
Según lo que me informan, el tema tiene que ver principalmente a que los sistemas contables y presupuestales de la UniSon no se apegan a la normatividad establecida en la Ley General de Contabilidad Gubernamental, que es una ley de observancia en todo el país.
Me cuentas los que saben de estos embrollos, que sus Estados Financieros no reflejan, como debe ser, todas las operaciones financieras, presupuestales y patrimoniales de la Institución, al usar un sistema de contabilidad que no cumple a cabalidad con la ley en la materia.
Hasta ahí el asunto.
Pero perspicaz como es uno, luego luego saltaron a la cabeza varias interrogantes: en verdad no contará nuestra universidad con la capacidad técnica para hacer lo conducente a fin de apegarse a lo que marca la normatividad?. Será cosa de pesos y centavos para cambiar dichos sistemas contables y presupuestales con dinero que no hay?. Quién sabe.
Por lo pronto, sin necesidad, creo, la Universidad de Sonora arrastra una calificación reprobatoria a cuestas.
Tuve la oportunidad de entablar comunicación vía redes con la rectora María Rita Plancarte Martínez y efectivamente me confirmó que se trata de un problema técnico del sistema de contabilidad gubernamental que ya estaban subsanando.
Creo que es aceptable la explicación. No se trata, insisto, de un mal uso del recurso público. La UniSon es uno de los entes más auditados, no solo del Estado y la Federación, sino que por sí misma ordena una auditoría anual con despachos contables reconocidos, a fin de “calibrar” cómo andan en su operación financiera.
Pero bueno, lo que sí me parece realmente inaceptable es cómo la autoridad universitaria no asuma una posición mediática del porqué su cuenta pública es reprobatoria. Se callan. Dejan correr las cosas. La sociedad tiene derecho a la información, en aras de la transparencia y rendición de cuentas. Informar es transparentar.
ENCUADRE MORBOSO
Husmeando por los diversos portales informativos del país, me encuentro con una “joyita” de nota informativa redactada por la colega Amalia Escobar, en el periódico El Universal.
Resulta y resalta que el pasado miércoles 16, según este despacho, poco después de mediodía, llegó una joven de 29 años, Yuleni, hasta las instalaciones de un kínder de la fronteriza ciudad de Nogales, Sonora, para arremeter física y verbalmente contra una de las maestras, en el mismísimo salón de clases, ante decenas de niños ahí presentes.
El motivo?. La maestra cometió el pecado capital de mandarle una solicitud de “amistad” por redes sociales a su esposo.
Más allá de lo surrealista de la escena, este es un claro ejemplo de la parafernalia que se vive en el ciberespacio. Las malditas y benditas redes.
La mujer fue detenida por la policía, y a partir de ahora vivirá con ese estigma. De lo que pasó con el esposo, la nota no dice nada. No quiero ni pensarlo. El trauma que significará también para su hijo (a) de ver a la mamá golpeando a su maestra. Un signo de nuestros tiempos. Y luego nos quejamos del porqué de las conductas violentas de los hijos.
ENCUADRE DE GLOBOS, CARRERAS Y BALACERAS
Todo un éxito resultó el Tercer Festival del Globo que organizó el ayuntamiento de Hermosillo. El cielo de la ciudad se vistió de colores este fin de semana, con la presencia de miles de personas que pudieron disfrutar de un área de comida, juegos infantiles, paseos en globos aerostáticos anclados, entre otras amenidades.
El sábado cerró en grande con la música del famoso Tropicalísimo Apache y el domingo con la no menos famosa Sonora Dinamita, allá por rumbos de las instalaciones de la Unión Ganadera Regional de Sonora. Luego vuelvo con el primer baile. Punto bueno para Toño Astiazarán, el alcalde capitalino.
También se celebró en tierras sonorenses la tercera edición de “La Gran Carrera del Desierto” en Puerto Peñasco, con la participación de 700 corredores (según da cuenta el comunicado oficial) de diez nacionalidades y 16 estados de la República Mexicana. Sin duda, un gran escaparate turístico para nuestra entidad. Punto bueno para el gobernador Alfonso Durazo.
Sin embargo, ambos eventos se vieron un tanto empañados con un par de hechos violentos.
La noche del sábado se vivió una gran movilización policiaca en las mismísimas instalaciones de la Unión Ganadera donde se celebraba el baile del Tropicalísimo, al reportarse una balacera entre sujetos armados y policías municipales. El saldo: un agente muerto y otro más herido. Para fortuna de los organizadores, pocos (comparativamente a los miles de asistentes) se enteraron del suceso, ya que el grupo musical no dejó de tocar hasta la hora marcada para su finalización. De haberse registrado lo contrario, la estampida de aquel mar de personas habría causado resultados más serios.
Luego, el asesinato del norteamericano Nicholas Douglass Quets, de 30 años de edad, originario de Tucson, Arizona, quien viajaba acompañado de su novia y suegra cuando recibió múltiples disparos sobre la carretera Altar-Caborca en el estado de Sonora, la noche del viernes pasado.
Según trascendió, el joven surfista viajaba en una camioneta pickup Ford gris acompañado de sus familiares, de Nogales a Puerto Peñasco, cuando presuntamente fue obligado a detenerse por un grupo armado al que hizo caso omiso y le dispararon.
Ambos ataques armados con consecuencias fatales. Punto malo para las autoridades encargadas del combate a la delincuencia organizado y desorganizada.
ENCUADRE FÚNEBRE
Desde estos párrafos mandamos un fuerte abrazo solidario a familiares y amigos de Fernando “El Flaco” Palafox, oriundo de Huatabampo, y quién durante muchos años laboró como reportero deportivo en Telemax.
Tuve la oportunidad de conocerlo bien, de tratarlo laboral y personalmente. Un muy buen ser humano, afable, generoso en la amistad, entregado a su trabajo y familia.
Este domingo se le brindó un merecidísimo homenaje de cuerpo presente en las instalaciones de su casa televisora, Telemax, a instancias del dirigente del Stirtt, Pepe Victorín. Descanse en paz nuestro querido “Flaco”. Se le extrañará.
IN PROXIMUM
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