CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) tiene conocimiento, “por lo menos desde 2020”, de que los cárteles del narcotráfico producen fentanilo en México, según correos electrónicos de esa institución entregados por el colectivo Guacamaya a la ONG Elementa DDHH.
En el estudio “Radiografía de la prohibición: política de drogas en México 20218-2024”, presentado este martes, la ONG publica un oficio del Centro Regional de Fusión de Inteligencia del Sureste (Cerfise) de la Sedena que indica la existencia de un laboratorio clandestino en el que se producen, cada semana, “unas 20.000 dosis de ‘fentanilo’ en polvo o pastillas”.
El documento, fechado el 30 de julio de 2020 y el cual forma parte de los miles de correos electrónicos hackeados por Guacamaya a la Sedena, señala que el laboratorio de fentanilo fue ubicado en una región del noroeste de México, donde opera el Cártel de Sinaloa y que la droga, un opioide sintético 100 veces más potente que la morfina, tiene como destino principal el mercado estadounidense.
El estudio de Elementa DDHH, una ONG feminista, de derechos humanos y estudios sobre drogas, señala que a pesar de que el presidente Andrés Manuel López Obrador negó durante años la producción de fentanilo en México “existía información que demostraba lo contrario”.
El oficio de la Sedena filtrado por Guacamaya a la ONG mexicana y colombiana indica que el masivo ingreso de mercancías por el puerto de Veracruz y el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec “conlleva” la “introducción de millones de importaciones” chinas y esto amplía la posibilidad de que ingresen precursores químicos de fentanilo y de que los cárteles que operan en el sureste de México “adopten la elaboración de esta droga”.
Otro documento de inteligencia militar de marzo de 2020 filtrado a Elementa DDHH habla también de la producción de fentanilo en la zona de Culiacán y advierte que las disputas por el control de la fabricación de esa droga entre células del Cártel del Pacífico (Cártel de Sinaloa) implica “el riesgo de que se incremente la violencia”.
Estos oficios reservados de la Sedena fueron elaborados tres años antes de que López Obrador negara de manera enfática en las Mañaneras que en México se produzca fentanilo.
“Aquí nosotros no producimos fentanilo y nosotros no tenemos consumo de fentanilo”, dijo López Obrador en su conferencia de prensa matutina el 9 de marzo de 2023.
El 4 de mayo de ese año, el secretario de la Marina, almirante José Rafael Ojeda Durán, negó “totalmente” que México sea un país donde se produzca fentanilo y afirmó que en los laboratorios en Sinaloa presentados en videos por los medios ingleses Sky News y Channel 4 se procesaban, en realidad, metanfetaminas.
En marzo pasado, López Obrador aceptó, por primera vez, que en México se produce fentanilo.
“El fentanilo se produce en Estados Unidos, Canadá y México. Y los precursores químicos proceden de Asia”, dijo el presidente en una entrevista con la cadena estadounidense CBS.