México se está rezagando en la competencia global por metales críticos clave, pese a tener reservas importantes de cobre, plata y manganeso, advierten expertos del sector minero.
EL FINANCIERO
México podría estar perdiendo una oportunidad estratégica clave en la nueva geopolítica minera global por la falta de una política clara sobre metales críticos, advirtió Fernando Alanís, expresidente de la Cámara Minera de México (Camimex), quien señaló que, aunque 22 países ya han definido sus listas de minerales críticos, el país está rezagado en el tema
“Muchos países ya han establecido estrategias para el desarrollo de su industria de minerales críticos, pero México permanece sin ruta a pesar de ser productor relevante de al menos siete metales clave como la plata, el oro, cobre, manganeso, fluorita, entre otros”.
Alanís subrayó que la transición energética global exige una demanda sin precedentes, al afirmar que “el consumo podría duplicarse o incluso cuadruplicarse en los próximos veinticinco años.”
En particular, destacó el caso del cobre, que, a su juicio, sólo en ese mineral harán falta cuatro millones de toneladas adicionales para 2030 y hasta dieciséis millones para 2050.
El desarrollo de minas tarda mucho tiempo, una mina tarda en promedio 18.5 años en desarrollarse y nosotros, por no entregar concesiones, ya vamos muy rezagados”, destacó el expresidente Camimex.
Para ilustrar lo que México podría perder, Fernando Alanís, expresidente de Camimex contrastó su situación con la de China, país que desde hace más de cinco décadas priorizó la minería como base de su desarrollo industrial.
“China no tiene petróleo, pero tiene metales, las tierras raras. Gracias a esa visión estratégica, ese país controla diecinueve de los veintiún metales críticos, produce el 80 por ciento de las baterías de litio y concentra el 40 por ciento de la refinación mundial de cobre, además de dominar la cadena de imanes permanentes para motores eléctricos”, enfatizó Alanís.
Este grado de concentración, advirtió, no sólo es un tema económico, sino también de seguridad: “genera riesgos globales, embargos, guerras comerciales y volatilidad”, dijo, recordando episodios pasados cuando China restringió las tierras raras para Japón y Estados Unidos.
En el caso de México, las reservas de metales como plata, cobre y manganeso son prometedoras, pero el gran problema es la ausencia de una lista oficial y de políticas públicas alineadas con industrias estratégicas como la automotriz, aeroespacial o eléctrica.
Además, Alanís fue enfático al hablar del litio, al advertir que “los yacimientos en arcillas del norte del país no son económicamente viables con la tecnología actual. Las arcillas […] no es rentable. Es así de fácil hasta ahora. Debemos centrarnos en los metales que sí tenemos y no en esos que no son viables”.
Para revertir esta situación, el experto propuso que México debe repensar su política minera con visión estratégica: hacer énfasis en incentivos, certidumbre regulatoria, alineación institucional y estándares ambientales internacionales.
“El país requiere visión, incentivos, certidumbre regulatoria, alineación institucional y estándares ambientales internacionales para aprovechar la oportunidad. Un país sin minería es un país sin desarrollo. Punto, se acabó”, alertó Alanís.

México sin potencial en producción de tierras raras
Por su parte, Armando Alatorre, vicepresidente del Colegio de Ingenieros de Minas, Metalurgistas y Geólogos de México (CIMMGM), afirmó que México difícilmente se convertirá en un actor relevante en el mercado de tierras raras, debido a la ausencia de yacimientos con volumen competitivo y a la parálisis exploratoria que vive el sector.
Señaló que, mientras China, Australia y Estados Unidos aceleran estrategias para asegurar estos insumos clave para la transición energética, México sigue sin una política clara ni proyectos en marcha.
Hasta ahora, lo que yo puedo decir es que México no cuenta con depósitos de escala significativa de tierras raras. Además, sin exploración sostenida, es imposible identificar recursos que pudieran ser competitivos”, dijo Alatorre.
A ello se suma la reforma minera de 2023, que frenó la apertura de nuevas concesiones y redujo la superficie disponible para proyectos.
“No hay exploración y sin exploración no hay descubrimientos. México está quedando fuera de la competencia de las tierras raras. Ahí no vamos a ser potencia y aunque puede que encontremos algunos yacimientos, no serán relevantes”, sostuvo.
Expertos aseguran que México no cuenta actualmente con reservas significativas ni con el marco regulatorio necesario para competir en el creciente mercado de tierras raras impulsado por la transición energética.
ENLACE: México, en riesgo de quedar fuera de la carrera por minerales críticos – El Financiero









