Los bloqueos mixtos de transportistas y productores agrícolas habían tocado a media tarde 25 entidades. Fue la primera protesta nacional que enfrenta este régimen, y no me da la memoria para recordar una de mayor alcance territorial que la de ayer.
Subestimando la movilización, transmitiendo una sensación de ¡cómo nos hacen esto a nosotros!, la secretaria de Gobernación acusó que detrás de los bloqueos hay una motivación política. Con ese timbre dejó una frase que, en rigor, traiciona la esencia de su movimiento (lopezobradorista, 4T), forjado en protestas y bloqueos. Pero es comprensible su sentimiento de incomprensión, es el de los personajes que detentan el poder.
“No hay motivo para que organizaciones afecten el derecho al libre tránsito de la población”, dijo, dándole una bofetada a su historia. Para no perderme en la palabrería fui al archivo por un reportaje que publiqué en 1996: un compendio de denuncias sobre cómo las carreteras se habían convertido en cotos de salteadores del transporte de pasajeros y carga, 29 años hace.
Para no ir tan lejos, revisé la inconformidad de los agricultores al levantar sus bloqueos hace seis semanas, prometieron regresar. Motivos de protesta no faltaban. Protestas que tienen por ob






