La viuda ha rendido protesta como presidenta municipal para continuar con el proyecto político de su esposo frente a las críticas al Gobierno de Claudia Sheinbaum por desatender los llamados de ayuda del alcalde asesinado
Elia Castillo
La viuda ha rendido protesta como presidenta municipal para continuar con el proyecto político de su esposo frente a las críticas al Gobierno de Claudia Sheinbaum por desatender los llamados de ayuda del alcalde asesinado
Grecia Quiroz, viuda de Carlos Manzo, ha saltado del anonimato a los titulares nacionales e internacionales en menos de una semana, lo mismo que Uruapan, un poblado de Michoacán en el suroeste mexicano. Este miércoles, ante el Congreso del Estado, Quiroz ha tomado protesta como el relevo de su esposo en la presidencia municipal. “Mataron a Carlos Manzo, pero no pudieron matar lo que despertó”, ha sido parte del mensaje de la mujer que ha tomado las riendas de un municipio aterrorizado por el crimen organizado. Quiroz ha dejado expuesta la falta de respuesta que tuvieron los llamados de su esposo al gobierno federal por la situación de violencia. “Él temía por su vida, por la de sus hijos, por la mía y jamás le hicieron caso”, lanzó. Sus palabras no fueron refutadas, Morena y sus aliados, PVEM y el PT, guardaron silencio. A la protesta le ha seguido una promesa. “Voy a seguir los pasos de Carlos Manzo les voy a dejar un Uruapan, un Michoacán y un México que él hubiese querido”, ha dicho frente a un Legislativo con mayoría oficialista.

La llegada de Quiroz al Congreso del Estado ha requerido de un aparato de seguridad similar al de un jefe de Estado. La Guardia Nacional ha estado a cargo. Una veintena de elementos de la corporación encargada de la seguridad pública en todo el país han escoltado en vehículos y a pie la camioneta blindada en que llegó la viuda ataviada con un vestido negro. Su esposo fue un denunciante sistemático de la violencia en el Estado y de la ola de extorsiones perpetradas por las células criminales. “No quiero ser otro presidente municipal más de la lista de los ejecutados”, dijo Manzo como si se tratara de un vaticinio. Su demanda constante de ayuda al Gobierno de Claudia Sheinbaum tuvo eco con 14 elementos de la Guardia Nacional que nada pudieron hacer para evitar su asesinato.
Un minuto de aplausos ha antecedido el arribo de Quiroz al salón de sesiones, seguido de un puñado de consignas que se mantuvieron durante los 50 minutos que duró la asamblea. “¡No estás sola, no estás sola!”, se ha escuchado una y otra vez. Unos días atrás, en el funeral de su esposo y padre de sus dos pequeños hijos, la mujer sacudió a la sociedad. “No mataron al presidente de Uruapan, mataron al mejor presidente de México. El único que se atrevió a decir siempre la verdad, sin temor por su familia ni por dejar huérfanos a sus hijos”, dijo horas después de que Manzo fuera asesinado a tiros en plena plaza pública durante las festividades del Día de Muertos. La votación ha sido unánime en una sesión salpicada con reclamos al Gobierno de Sheinbaum por desatender los llamados de auxilio del séptimo presidente municipal asesinado en el último año. “Presidenta, Claudia Sheinbaum, no puede decir que no sabía, usted no lo recibió. Su silencio tiene nombre y apellido, tiene rostro, tiene hijos y tiene viuda”, lanzó Carlos Bautista Tafolla, diputado independiente e integrante del Movimiento del Sombrero, nombre con el que bautizó Manzo a su proyecto político.
El discurso de Quiroz no ha dejado cabo suelto. Abrazada al sombrero de su esposo, ha dicho: “El legado de Carlos Manzo va a seguir así hayan callado su voz. A quienes hayan dado la indicación de arrebatarle la vida de la manera más cruel [les digo], el Movimiento del Sombrero seguirá”. La mujer que ha asumido la Administración de Uruapan ha convocado a los ciudadanos a continuar con la lucha. Los llamados de ayuda que Manzo hizo al gobierno federal y el anuncio de la intervención de la Administración de Sheinbaum en Michoacán con un “plan por la paz y la justicia”, marcaron el tono del mensaje. “Qué triste que tuvieran que arrebatarle la vida a Carlos Manzo para que ahora sí manden seguridad, para que ahora sí quieran blindarnos”, soltó.
La voz del movimiento independiente, legado de Manzo, ha sido la primera de la sesión. Bautista Tafolla ha sido frontal. “A Carlos no lo asesinaron, ustedes dejaron que lo asesinaran. Su muerte fue una ejecución anunciada. Lo dijo, lo denunció y nadie lo escuchó”, ha dicho frente a los ojos del oficialismo fijos en él. El trámite ha sido rápido, sin tropiezos, sin enfrentamientos. Los legisladores oficialistas han apretado los labios y han soportado el embate de la oposición, del Movimiento del Sombrero y de la presidenta municipal de Uruapan. De la docena de fuerzas políticas que forman el Congreso local, solo tres han tomado la palabra previo a la toma de protesta. Guillermo Valencia, coordinador parlamentario y líder del PRI en Michoacán, ha pugnado por la continuidad de la herencia política del alcalde asesinado. “Dejo empeñada mi palabra. No me importa perder la vida, pero vamos a luchar siempre por honrar la memoria de Carlos Manzo”, ha deslizado el priista. “¡Ni un paso atrás!, ¡ni un paso atrás!”, fue la proclama que se escuchó antes de la votación. “Estamos contigo, Grecia, estamos con Uruapan”, ha dicho Vanessa Caratachea a nombre del PAN.
Grecia ha llegado a la presidencia municipal de Uruapan sin antecedentes de cargos públicos. Antes del asesinato de su esposo, su trabajo en el gobierno municipal se limitaba a la presidencia honoraria del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en Uruapan. La entrega de apoyos a niños, mujeres y adultos mayores habían ocupado gran parte de sus redes sociales. Este miércoles su vida ha cambiado, la viuda de Manzo ha asumido el gobierno que a su esposo le costó la vida.












