Un buen amigo regularmente enterado de lo que sucede al interior de los Ceresos en Sonora, me decía que lo visto en el video donde el Nata Cano se avienta un palomazo con sus cuates al compás de bebidas espirituosas, no es nada comparado con lo que se vive frecuentemente en el “cuadro”, como se le conoce coloquialmente al penal.
Las fiestas con “tochomorocho” son el pan nuestro de cada día.
Sarcásticamente me comenta, que en algo se tiene que divertir la población penitenciaria…sobre todo la que tiene dinero.
Me parece que no es una situación que prevalezca solo en los Ceresos de la entidad, sino que es un mal sumamente arraigado en el sistema penitenciario nacional. La corrupción campea.
Capos del narco se han fugado de penales de máxima seguridad, que no pueda celebrarse una fiestecita en su interior. Faltaba más.
De siempre, estos mal llamados centros de readaptación social han sido utilizado por los gobiernos -unos más que otros- como una fuente de recursos para ejercer gastos sin comprobar o para engrosar los bolsillos de algunos funcionarios.
Por eso es que viven permanentemente en crisis, debido a la complejidad de intereses que ahí se mezclan.
Pero siguiendo con el tema del Nata Cano y su jolgorio al interior del Cereso 1 de Hermosillo: el colega Jorge Morales asegura que ya fueron llamados a declarar un comandante y un custodio del penal en relación a los hechos. Ya veremos qué soltaron.
Por lo demás, me tiene sumamente intrigado quién fue el osado que tomó e hizo circular el video. O fue alguien muy enojado o alguien muy travieso.
¿Cómo la ve, usted?
ENCUADRE DE COSAS BUENAS
En mi época del diarismo reporteando para Telemax, en varias ocasiones tuve que atender conatos de broncas entre estudiantes, de malvivientes contra estudiantes o de padres de familia contra autoridades de la Secundaria Técnica No. 72, ubicada en la colonia Altares, al sur de Hermosillo. Parecía el cuento de nunca acabar, sin que en ese entonces, a la autoridad le importara mucho.
A pocos años de distancia, hoy la historia se cuenta diferente, principalmente gracias al esfuerzo y compromiso de padres y madres de familia preocupados por ofrecerles a sus hijas e hijos actividades extracurriculares que contribuyan a su formación personal, y desde luego, que impacten en el nuevo rostro del plantel.
Les cuento: desde hace unos meses a la fecha se conformó ahí un grupo de danza, ahora orgullo de la secundaria, a cargo del profesor Ángel Acuña, con participaciones en concursos y festivales, amén de sus presentaciones en televisión. Un excelente proyecto.
Por increíble que parezca, me dicen que esto ocasionó que otras escuelas se hayan motivado para ofrecer talleres a su alumnado en la búsqueda de inculcarles valores como la responsabilidad, compromiso, trabajo en equipo, entre otros.
Ciertamente, hoy la secundaria 72 hace ruido, pero para bien, gracias a sus excelentes resultados en deporte, danza y cultura.
Por eso es de felicitar por su esfuerzo y talento a los y las jóvenes Renee Corrales, Ximena Álvarez, Matías Valenzuela, Ayrim Carrasco, Pancho Villa, Damián Lugo, Karla Granillo, Dominnycka Fimbres, Alejandra González, Joel García, Kenneth Hernández, Cruz Luna, Karim Cruz, María Luis Espejo, Carlos Hernández y Bridgette Duarte.
Cuando se juntan los jóvenes estudiantes, los padres de familia y las autoridades educativas en un solo objetivo, siempre suceden cosas positivas.
¡Enhorabuena!
Otro ejemplo de preparación, tenacidad y gran talento es el caso del hermosillense Osvaldo Sánchez Valenzuela, vecino de la colonia Modelo, quien triunfara recientemente en el Festival de Cine de Venecia 2025, con una extraordinaria actuación en el largometraje “En el camino”, que obtuvo la presea como la mejor película en la sección Horizontes.
Osvaldo es un joven actor, con un buen recorrido en el mundo de la actuación teatral y cinematográfica.
Me comentaba el colega y amigo Franco Becerra que ha seguido de cerca su carrera profesional, desde sus primeros pasos en la Compañía Teatral del Norte que dirige el dramaturgo Sergio Galindo Sánchez, hasta ser testigo de su talento en el Festival Luna de Montaña que año con año organiza el Instituto Sonorense de Cultura con el entusiasmo y la dedicación del apreciado escultor Jess Dávila y su esposa Coyito, en la pintoresca población serrana de Huachinera, Sonora.
Felicidades, pues, para Osvaldo y familia. ¡Qué orgullo!
ENCUADRE PUNZANTE
1). Quien pasó bastante aceite la noche del 15 de septiembre fue el alcalde de Ures, Gastón Rodríguez, ante un pueblo que protestó y repudió su actitud a favor de la construcción de una presa a la altura de Puerta de Sol. Ures ya presenta algunos rasgos de ingobernabilidad.
2). Otra a quien también le tembló la voz a la hora de dirigirse a sus (in) gobernados fue a la alcaldesa de Cananea, Esmeralda González, quien tuvo que resistir los gritos y abucheos de manifestantes en desacuerdo por políticas tomadas por el ayuntamiento.
3). El que tuvo casa llena en su informe de gobierno fue el presidente municipal de Cajeme, Javier Lamarque Cano. Me cuenta mi eficiente corresponsal en el sur del Estado que se dieron cita en el Arena del Itson desde diputados locales, federales, senadores, empresarios, dirigentes magisteriales, obreros, campesinos, funcionarios de gobierno, exalcaldes y hasta la raza de a pie.
Sin duda, el peso de la cargada. Me dicen que la cara de Lorenia Valles y de Heriberto Aguilar denotaba una especie de resignación. ¿Será?
4). La profusa autopromoción en redes sociales de los representantes del gobierno estatal -sobre todo de aquellos con aspiraciones electorales- en los informes de trabajo de los distintos ayuntamientos, casi lograron opacar al alcalde en cuestión y su lectura de resultados. Como se dice coloquialmente: quisieron ser más que el muerto.
IN PROXIMUM
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