CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Horas después de los reclamos del presidente Andrés Manuel López Obrador hacia las observaciones del Departamento de Estado de Estados Unidos sobre la crisis de derechos humanos en México, el embajador Ken Salazar resaltó la cooperación entre ambos países en materia de combate al tráfico de drogas, y tomó como ejemplo la captura de los líderes criminales Rafael Caro Quintero y Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera”.
En un discurso que ofreció en la Conferencia Multilateral de Drogas Sintéticas, organizado por Oficina de Asuntos Antinarcóticos y Aplicación de la Ley (INL) –a través de la Embajada de Estados Unidos en México–, Salazar también resaltó la detención de Néstor Isidro Pérez Salas, “El Nini”, quien era jefe de escoltas del grupo dirigido por los hijos de Guzmán Loera, conocido como Los Chapitos.
Los tres delincuentes a los que se refirió Salazar encabezaron facciones del Cartel de Sinaloa, la organización criminal a la que el gobierno de Estados Unidos acusa de traficar la mayor parte del fentanilo que se consume en su territorio, causando decenas de miles de muertes al año.
Durante su intervención, Salazar recalcó que, en materia de seguridad, las administraciones de López Obrador y de Joe Biden han tenido “muchísimas reuniones en Washington y aquí en México”, donde abordaron temas como el tráfico de fentanilo o de armas, la trata de personas, la delincuencia o la migración.