El flamante candidato a vicepresidente publicó “Hillbilly, una elegía rural” en 2016. Hablaba de él mismo pero también describió a los votantes del empresario
Si uno busca en un traductor “Hillbilly” lo primero que aparecerá es la palabra “paleto”, que significa “poco educado”, o “de modales poco refinados”. Y, en otra instancia -ya se sabe, el diccionario no es neutro- “campesino”. Así -Hillbilly, una elegía rural- es el título del libro que hizo famoso a J.D.Vance, quien desde este lunes es candidato vicepresidente de los Estados Unidos, acompañando a Donald Trump. Y que, por como vienen las cosas, probablemente ocupe el cargo.
Pero eso no es todo: el libro que se llama así no es una invención de Vance: es una autobiografía. ¿De donde viene el posible futuro vicepresidente de los Estados Unidos? De un mundo campesino, poco refinado. Toda una definición para el hombre que Trump puso a su lado.
“Quiero que la gente sepa lo que se siente al casi darse por vencido y por qué podrías hacerlo”, escribe allí Vance. “Quiero que la gente comprenda lo que sucede en la vida de los pobres y el impacto psicológico que la pobreza espiritual y material tiene en sus hijos. Quiero que la gente entienda el sueño americano tal como lo encontró mi familia. Quiero que la gente entienda cómo se siente realmente la movilidad ascendente. Y quiero que la gente entienda algo que aprendí recientemente: que aquellos de nosotros que tenemos la suerte de vivir el sueño americano, los demonios de la vida que dejamos atrás continúan persiguiéndonos”.
Desde su publicación, en 2016, Hillbilly, una elegía rural ha sorprendido a la audiencia y ha encabezado las listas de los más vendidos en The New York Times en agosto de 2016 y enero de 2017. El libro ayudó a explicar las motivaciones de los votantes blancos de clase trabajadora, un grupo demográfico clave en el ascenso de Donald Trump como líder del Partido Republicano. Este libro de Vance desarrolla la idea de una cultura anglo-sajona rural que está en crisis y es la base ideologica de Vance y de mucho del trumpismo.
“Para niños como yo”, dice Vance, “la parte del cerebro que se ocupa del estrés y los conflictos siempre está activada: el interruptor se activa indefinidamente. Estamos constantemente listos para pelear o huir, porque hay una exposición constante al oso, ya sea un padre alcohólico o una madre desquiciada. Estamos programados para el conflicto. Y ese cableado permanece, incluso cuando ya no hay más conflictos”.
La recepción del libro ha sido mixta. Mientras algunos conservadores como Rod Dreher y Reihan Salam elogiaron a Vance por su análisis franco, otros críticos como Jared Yates Sexton y Sarah Jones cuestionaron sus generalizaciones sobre la clase trabajadora blanca. The New York Times destacó la valentía de Vance al confrontar temas tabú, aunque notó que algunos lectores podrían no estar de acuerdo con sus conclusiones.
La trama
En definitva, que ofrece una perspectiva íntima y poderosa sobre la vida en una de las regiones más olvidadas de Estados Unidos: los Apalaches. A través de su narrativa personal, Vance nos introduce en el mundo de los “hillbillies” (un término despectivo para referirse a los blancos pobres de las zonas rurales montañosas), una comunidad profundamente impactada por la pobreza, la adicción y la decadencia económica.
El libro está estructurado en tres partes que abordan diferentes etapas de la vida de Vance y sus reflexiones sobre su origen y el destino de su gente. A lo largo de estas secciones, el autor describe cómo creció en una familia disfuncional, marcada por la inestabilidad de su madre, una mujer adicta a las drogas y casada en múltiples ocasiones. Nos presenta también a sus abuelos, quienes, a pesar de sus problemas personales, jugaron un papel crucial en su desarrollo y lo mantuvieron alejado del camino autodestructivo que muchos de sus contemporáneos tomaron.
El relato de Vance no solo es una crónica de su vida, sino también un análisis social y político de una comunidad que se siente abandonada por las élites políticas y económicas. Describe la desindustrialización que ha asolado a las ciudades de Rust Belt -el cinturon industrial ubicado en el noreste y medio oeste estadounidense- y que produjo desocupación y un sentimiento de desesperanza generalizado. Los “hillbillies” se sienten traicionados por ambos partidos políticos y su resentimiento se transforma en apoyo a figuras políticas que prometen cambios drásticos.
Escribe Vance: “Pero este libro trata de otra cosa: lo que sucede en la vida de la gente real cuando la economía industrial va hacia el sur. Se trata de reaccionar ante las malas circunstancias de la peor manera posible. Se trata de una cultura que fomenta cada vez más la decadencia social en lugar de contrarrestarla”.
El sueño americano
Uno de los temas centrales del libro es el “sueño americano” y cómo este ha sido inaccesible para muchos en la comunidad de Vance. A través de la lucha personal del autor para salir de la pobreza y alcanzar el éxito –desde su tiempo en el Cuerpo de Marines de los Estados Unidos hasta su graduación en la Universidad de Yale–, Hillbilly… explora las barreras sistémicas y las decisiones individuales que influyen en el ascenso social. Vance argumenta que, aunque el trabajo duro es esencial, la movilidad ascendente también está obstaculizada por factores culturales y económicos profundamente arraigados.
El autor no escatima en reflexiones personales, lo que añade una capa de autenticidad y emoción a la narración. Habla de la vergüenza y la culpa que siente por alejarse de su comunidad y convertirse en parte de la élite educada que alguna vez despreciaba. Sin embargo, también reconoce que sin este alejamiento, no hubiera podido alcanzar la estabilidad y la oportunidad que ahora disfruta.
La película
En 2020, Hillbilly… fue adaptado al cine bajo la dirección de Ron Howard. Taylor. La película conserva la esencia del libro y destaca las actuaciones de Amy Adams como Bev, la madre de Vance, y Glenn Close como Mamaw, su abuela.
Aunque la película recibió críticas mixtas, es significativa por su intento de llevar a la pantalla grande los desafíos y las luchas de la comunidad descrita por Vance. Además, la adaptación cinematográfica puede ofrecer una representación visual de los temas abordados en el libro, proporcionando una nueva dimensión para entender las dificultades y la resiliencia de los “hillbillies”.
Desde América latina
Para un público latinoamericano, Hillbilly… ofrece una ventana a una realidad muchas veces desconocida o malentendida de Estados Unidos. Nos obliga a confrontar nuestras propias preconcepciones sobre la pobreza y la clase social y a reconocer las similitudes y diferencias con las luchas que enfrentan las comunidades marginadas en América Latina. Al igual que en muchas partes de nuestra región, los problemas de los “hillbillies” están enraizados en la historia, la política y la economía, y no tienen soluciones fáciles.
El libro también destaca la importancia de la resiliencia y el papel de la familia. A pesar de los problemas, la familia de Vance es una fuente constante de apoyo y un ancla emocional. Sus abuelos, en particular, aunque problemáticos, proporcionan una estructura que le permite prosperar.
Hillbilly ha suscitado debates intensos en Estados Unidos, especialmente en el contexto de las elecciones presidenciales en las que el resentimiento y el desencanto de las comunidades blancas rurales jugaron un papel significativo. La elección de Vance como candidato a vicepresidente de Donald Trump subraya la relevancia continua de estos temas y aporta una capa adicional de interés para el público internacional.
Quizás esta elección se entienda en frases como la que sigue: “No necesitamos vivir como las élites de California, Nueva York o Washington, D.C. No necesitamos trabajar cien horas a la semana en bufetes de abogados y bancos de inversión. No necesitamos socializar en cócteles. Necesitamos crear un espacio para que los J.D. y Brians del mundo tengan una oportunidad. No sé cuál es exactamente la respuesta, pero sé que comienza cuando dejamos de culpar a Obama o Bush o a las empresas anónimas y nos preguntamos qué podemos hacer para mejorar las cosas”.
Hillbilly, una elegía rural (Frases)
“No hay grupo de estadounidenses más pesimista que los blancos de clase trabajadora”.
“Los psicólogos llaman ‘impotencia aprendida’ cuando una persona cree, como yo durante mi juventud, que las decisiones que tomé no tuvieron ningún efecto en los resultados de mi vida”.
“El viejo refrán dice que es mejor tener suerte que ser bueno. Aparentemente, tener la red (network) adecuada es mejor que ambas cosas”.
“Fuera de la sartén y en el fuego. El caos engendra caos. La inestabilidad engendra inestabilidad. Bienvenido a la vida familiar del campesino americano”.
“Barack Obama ataca el corazón de nuestras inseguridades más profundas. Es un buen padre mientras que muchos de nosotros no lo somos. Él viste trajes en su trabajo mientras que nosotros usamos monos, si es que tenemos la suerte de tener un trabajo. Su esposa nos dice que no deberíamos alimentar a nuestros hijos con ciertos alimentos y la odiamos por ello, no porque pensemos que está equivocada sino porque sabemos que tiene razón”.
“Hoy la gente me mira, mira mi trabajo y mis credenciales de la Ivy League, y asume que soy una especie de genio, que sólo una persona verdaderamente extraordinaria podría haber llegado a donde estoy hoy. . . Cualquier talento que tuviera, casi lo desperdicié hasta que un puñado de personas amorosas me rescataron”.
“Los estudios ahora muestran que a los niños de clase trabajadora como yo les va mucho peor en la escuela porque ven el trabajo escolar como una tarea femenina”.
“Por eso creo que cualquier programa político exitoso reconocería lo que los maestros de mi antigua escuela secundaria ven todos los días: que el verdadero problema para muchos de estos niños es lo que sucede (o no sucede) en casa”.
“Nuestros hábitos alimentarios y de ejercicio parecen diseñados para enviarnos a una tumba prematura, y está funcionando: en ciertas partes de Kentucky, la esperanza de vida local es de sesenta y siete años, una década y media menos que en Virginia. Un estudio reciente encontró que, algo único entre todos los grupos étnicos de Estados Unidos, la esperanza de vida de los blancos de clase trabajadora está disminuyendo”.
“Existe un movimiento cultural en la clase trabajadora blanca para culpar de los problemas a la sociedad o al gobierno, y ese movimiento gana adeptos día a día”.
Autor: Infobae