La vocera presidencial Karoline Leavitt aseguró que sigue vigente la fecha del 1 de febrero para que se cumpla la amenaza del magnate
WASHINGTON (apro). – La Casa Blanca reafirmó que el presidente Donald Trump se mantiene firme en su decisión de imponer tarifas arancelarias a las exportaciones de México y de Canadá a partir de este sábado 1 de febrero tal y como él mismo lo había advertido y amenazado.
“Hemos visto un nivel histórico de cooperación por parte de México pero, otra vez; hasta donde he seguido el asunto y lo que anoche dijo directamente el presidente es que el 1 de febrero sigue siendo la fecha”, declaró Karoline Leavitt, la nueva vocera de la Casa Blanca.
En su primera conferencia de prensa desde que Trump regresó a la presidencia el pasado 20 de enero, Leavitt apuntó que en la agenda del mandatario no se ha modificado su idea de imponer unilateralmente aranceles de 25% a las exportaciones mexicanas y canadienses.
A la portavoz se le preguntó sobre la posibilidad de que Trump, encima del 25% de impuesto que impondría a las importaciones mexicanas y canadienses, añadiría otro universal del 2.5 por ciento. La funcionaria recordó que no está en los planes presidenciales ese nivel o número tributario.
“Él dijo que es un poco muy bajo, quiere que sea más alto, pero se lo dejó a él tomar cualquier decisión”, subrayó Leavitt.
Como candidato y luego como presidente electo, Trump amenazó con imponer la tarifa arancelaria del 25% a Canadá y a México, que incluso aumentaría de manera gradual o disminuiría, dependiendo de lo que hicieran para contener el flujo de inmigración indocumentada y el trasiego a Estados Unidos de drogas elaboradas con fentanilo.
Cuestionada al respecto, Leavitt se salió por la tangente: “No me voy a adelantar al presidente para aconsejar a naciones extranjeras sobre lo que deben o no deben hacer para evitar estas tarifas. El presidente lo dejó muy claro que espera que cada una de las naciones de este mundo cooperen con la repatriación de sus ciudadanos”.
La vocera también se limitó a repetir que el presidente Trump ya puso las condiciones a los gobiernos de Canadá y México respecto a lo que tendrían que hacer para que no los castigue con el impuesto arancelario, en referencia a la seguridad fronteriza norte y sur de los Estados Unidos.