Los esfuerzos de china en pro de una reforma de la gobernanza global y de la normalización del multirateralismo son absolutamente claves en el actual contexto internacional, que se caracteriza por la decadencia económica de las naciones aun colonialistas de Europa y Estados Unidos y la turbulencia geopolitica por la guerra en Ucrania y el Medio Oriente, las cuales, como dijo el presidente XI Jingpin, ”tienen soluciones complejas” y deben resolverse cuidadosamente.
En esfe contexto, lo único más trascendental que este peligro es la transformación absolutamente histórica que se está desarrollando en todo el Sur Global, y cada vez más en todo el mundo. La cumbre del G20, celebrada en Brasil, terminó el 19 de noviembre con gritos y aullidos de los aun amos coloniales del mundo occidental, porque, como señaló la agencia Bloomberg: “si [la cumbre del G20 en] Río demostró algo, es que Occidente ya no está al mando”.
Tras el G20, Xi Jinping, se dirigió a Brasilia para una visita oficial de Estado con el presidente Lula, donde los dos líderes llevaron la relación de sus países al siguiente nivel. Elevaron su actual Asociación Estratégica Integral a una de “Comunidad de Futuro Compartido para un Mundo Más Justo y un Planeta Sostenible”. Los dos presidentes firmaron docenas de acuerdos económicos y establecieron un grupo de trabajo que concretará los planes para algunos de los proyectos más grandes de todo el continente durante los próximos dos meses. Reflejando la calidad polifónica de la colaboración entre estas dos naciones, Lula dijo: “Lo que China y Brasil hacen juntos resuena en todo el mundo”. Ambos líderes discutieron su propuesta conjunta de paz de seis puntos para Ucrania.
Si sumamos a esto la colaboración del presidente Xi con la presidenta peruana Dina Boluarte para presidir la inauguración el 14 de noviembre del enorme puerto de Chancay en Perú, que finalmente aflojará los lazos neocoloniales con Iberoamérica en su conjunto, y la votacion casi unánime el 20 de noviembre a otra resolución del Consejo de Seguridad de la ONU para un cese del fuego en Gaza (con solo el veto de Estados Unidos) , estos acontecimientos dan una indicación de la transformación que se está produciendo en el mundo, bajo el liderazgo de China y el Sur Global.
Hugo López Ochoa
Analista Político del Instituto Schiller