Alonso Urrutia y Arturo Sánchez / La Jornada
Al presentar la Estrategia Nacional de Seguridad, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo aseveró que no volverá la guerra contra el narcotráfico que emprendió Felipe Calderón. Eso es lo más importante. No buscamos ejecuciones extrajudiciales, que era lo que ocurría. ¿Qué vamos a usar? Prevención, atención a las causas, inteligencia y presencia.
El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, sostuvo que como parte de los cuatro ejes de la estrategia, se fortalecerán la investigación y la inteligencia para enfrentar al crimen organizado. De igual forma, en las entidades de mayor incidencia delictiva (Guanajuato, Baja California, Chihuahua, Jalisco, Guerrero y Sinaloa) hemos generado una estrategia de intervención para el combate a los delitos de alto impacto.
En conferencia, Sheinbaum Pardo anunció que García Harfuch y el secretario de la Defensa Nacional, Ricardo Trevilla, viajarían a Sinaloa para supervisar las acciones del gobierno federal para contener el brote de violencia –cuyo origen identificó en el acuerdo de Estados Unidos con uno de los grupos para trasladar a Ismael El Mayo Zambada a su territorio, sobre el cual no abundó–, y reunirse con el gobernador de la entidad, Ruben Rocha Moya.
Informó que como parte de una mayor coordinación con los estados, la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, la apoyará en el vínculo con el gobierno de Guanajuato, que sigue siendo la entidad más violenta y donde hay mayor consumo de drogas entre los jóvenes. Con el apoyo de las secretarías de Bienestar y Trabajo, se diseñarán acciones de política social para evitar que la juventud se incorpore a las bandas delincuenciales.
Se atenderán las causas, pues León, increíblemente es el municipio con mayor número de pobres en el país; Guanajuato es el estado donde el salario medio es menor que el salario mínimo. Evidentemente hay un modelo de desarrollo que fracasó.
García Harfuch informó que en la política de seguridad se elaboran diagnósticos regionales con una estrategia focalizada inteligente en la que se contempla un programa de atención a la extorsión y cobro de piso, además del despliegue de unidades especiales que cumplimentarán órdenes de aprehensión en puntos de mayor incidencia. Esto implicará una mayor coordinación con las fiscalías estatales porque 80 por ciento de los delitos son del fuero común.
La estrategia prioriza la prevención sobre la reacción ante los delitos, por lo que usando inteligencia y recursos tecnológicos más avanzados para analizar datos, identificar patrones y comprender las dinámicas en las zonas con mayor incidencia es cómo podemos desarrollar estrategias más efectivas para combatir a las organizaciones delictivas.
Para incrementar las acciones de inteligencia se creará la Subsecretaría de Inteligencia e Investigación Policial en la Secretaría de la Seguridad, que contará con las capacidades y herramientas tecnológicas para identificar redes criminales.
Sheinbaum destacó que en el ámbito de inteligencia e investigación, se fortalecerá más, creando el sistema nacional. Hoy (ayer) vamos a firmar la iniciativa para enviarla al Congreso para que haya coordinación de los sistemas de seguridad de la Defensa, de la Marina, de la Guardia Nacional y de la propia Secretaría de la Seguridad Ciudadana.
Otro eje de la estrategia es la consolidación de la Guardia Nacional, a la que García Harfuch definió como una policía federal institucional “con un esquema de formación, profesionalización y capacitación definida por una doctrina militar, bajo la regulación estricta que garantiza el respeto a los derechos humanos con la disciplina militar. Es falso que haya militarización, lo que estamos haciendo es aprovechar las capacidades de la Sedena para que –no importa el tiempo– la Guardia Nacional se pueda consolidar”.
Señaló que con 133 mil elementos, la Guardia Nacional es la única corporación que puede ofrecer seguridad a las familias en muchos municipios.