Este año Salud Digna atenderá a cerca de 18 millones de pacientes; el sueño que inició hace 21 años surgió como una manera de atender las necesidades del sector salud con servicios de diagnóstico a bajo costo y hoy es uno de los principales jugadores del sector.
Y detrás del éxito que tiene la empresa originaria de Culiacán, Sinaloa hay un grupo conformado por 12 mil colaboradores, un proceso apoyado en la automatización y la tecnología, y una asamblea creada recientemente para impulsar su crecimiento y permanencia.
La primera de las unidades de este laboratorio mexicano se ubicó en el centro del estado del norte; pasaron cuatro años para que la compañía abriera sus primeras 100 unidades, a partir del quinto se aceleró su expansión y hoy cuentan con 232 clínicas en México, Nicaragua, El Salvador y Guatemala.
“Salud Digna ha crecido a un nivel que no sospechaba y se convirtió en algo importante para la vida de mucha gente”, comentó Juan Carlos Ordóñez, director general de la compañía.
Con esta expansión, la empresa ya planea un nuevo modelo de negocio, basado en el momento posterior al diagnóstico, aunque también ha fortalecido su estructura organizacional para mantener su desempeño.
¿Quién es el dueño de Salud Digna?
En 2003, el empresario Jesús Vizcarra Calderón fundó Salud Digna de la mano de su familia y tras una mala experiencia.
La historia de la organización se remonta a la detección de un tumor que tuvo uno de sus hijos cuando sólo tenía cuatro años. En medio del apremio por encontrar una solución, finalmente lograron salvarlo, aunque en la mente del también ex presidente municipal de Culiacán también quedó la necesidad de abrir espacios de diagnóstico accesibles para la población mexicana.
La situación propició el espacio para que se abriera la primera unidad de los laboratorios que rápidamente ganaron terreno en el mercado.
El dueño de la empresa también es un magnate de la industria de alimentos: fue en 1969 cuando Isabel Vizcarra y María Calderón, padres de Jesús, fundaron una pequeña empresa familiar dedicada a la engorda de ganado que posteriormente se convirtió en SuKarne, una de las empresas más grandes del sector, conformada por más de 15 mil empleados.
Su hijo entró al negocio familiar en el área de marketing y en 1985 quedó a cargo de éste para después incursionar en la industria de salud.
La asamblea detrás de Salud Digna
A finales de junio, Salud Digna instauró una asamblea encargada de dar seguimiento al desarrollo de la compañía, un grupo conformado por 124 amigos, familiares y expertos en el sector salud, quienes evalúan la dirección de la organización.
Dentro de la organización participan personalidades de epidemiología, sector productivo, ambiente digital, filantrópico, entre otros.
“Buscamos hacer lo que otras organizaciones han hecho en el pasado, como en el caso del Tecnológico de Monterrey, donde don Eugenio Garza quiso asegurar su legado y que no se vendiera o se fuera hacia el lado del lucro. Se seleccionó a 124 personas escogidas por un sistema de valores, conciencia social y conocimientos que pueden hacer que permanezca el objetivo del carácter social”.
Así, sostienen que ante la ausencia del fundador de la compañía serán ellos los que tendrán la facultad de tomar las decisiones de la empresa.
Dentro de los participantes en este grupo se encuentran personalidades como:
Carlos Salazar Lomelín, ex presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
María Teresa Arnal, ex directora de Google México.
Rubén Rocha Moya, gobernador de Sinaloa.
Quirino Ordaz Coppel, embajador de México en España.
“Son consejeros honorarios pero en este caso tienen poder, ellos son la autoridad. Es un tema absolutamente honorario, no reciben un solo centavo ni invierten. Es un órgano de gobierno ya puesto de SD, para mantener el rumbo estratégico de la organización, para hacer garante y salvaguardas de que siga trabajando como lo hace y no se convierta en una empresa más”.
Este año, la compañía planea abrir 35 sucursales más
(mismas que requieren una inversión aproximada por 16 millones de pesos) y contempla definir el diseño de su nuevo modelo de operación.