La disponibilidad y el alto costo económico y social del litio plantean la necesidad de explorar nuevos materiales para su sustitución. Un reciente estudio alemán ha apostado por las baterías de aluminio ya que es un material más fácil de conseguir y puede reciclarse, pero ¿no es también altamente contaminante?
¿Qué dice el estudio? Un grupo de investigadores de la Universidad de Tecnología Bergakademie Freiberg ha desarrollado un prototipo de batería de aluminio que combina aluminio, grafeno y electrolito sólido de polímero. Este diseño puede ser muy prometedor porque, a diferencia del litio, el aluminio puede reciclarse. Además el uso de este polímero en estado sólido hace que se adhiera al aluminio siendo más seguro y reduciendo su impacto medioambiental.
Este nuevo proyecto, que tiene vistas a una producción industrial, está financiado por el Ministerio de Economía de Sajonia y el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) hasta finales del próximo año.
¿Por qué es importante? Las baterías de aluminio pueden ser un factor clave para sustituir a las de litio. Aunque el litio sea un material necesario en el desarrollo del futuro energético en sectores como los coches eléctricos o el almacenamiento de las energías renovables, se trata de un material altamente contaminante y escaso.
¿Cuánto es capaz de almacenar? Alemania es uno de los países donde más se ha extendido el autoconsumo. Las placas solares en los balcones es una realidad y actualmente se están utilizando baterías de 5kWh para almacenar el excedente de energía. El proyecto alemán busca superar esa capacidad y llegar a 10kW, ya que es la producción media diaria de un sistema fotovoltaico en el tejado de cada vivienda unifamiliar.
El proyecto Alpobat. La investigación está dentro del proyecto Alpobat, el cual se enfoca en los aspectos de reciclaje, seguridad y escalabilidad de la batería de aluminio. Los científicos quieren construir una planta piloto para producir células que son las piezas intermedias para fabricar dispositivos que almacenen la energía.
Almacenamiento estacionario. Existen otros tipos de almacenamiento estacionario, los cuales se orientan en sustituir al litio. Podemos encontrar diferentes enfoques, como el uso de baterías de coches eléctricos, las baterías de flujo redox o las baterías de estado sólido.
Si empezamos a utilizar el aluminio, ¿quién se lleva el trozo de pastel más grande? Aunque el proyecto está en fase de desarrollo y hasta el año que viene no saldrá el prototipo, es importante considerar el contexto global del aluminio. El estudio busca el reciclaje para reducir el impacto ambiental, pero China domina la producción mundial del aluminio, extrayendo el 60% de la producción en 2023. La dependencia del país asiático plantea desafíos en el futuro y sobre cómo se construirán los planes del abastecimiento y el mercado global de este material.