El Proyecto Saguaro se ha convertido en un símbolo claro de cómo los intereses económicos de morena se imponen sobre el medio ambiente y el interés público en México. No es una exageración. Este megaproyecto de gas ya acumula diez juicios de amparo por afectaciones ambientales, mientras Claudia Sheinbaum insiste en defenderlo pese a las advertencias científicas, los procesos judiciales en curso y el rechazo de amplios sectores de la sociedad. Esta defensa política se escuda en el discurso del desarrollo, pero en los hechos protege un modelo fósil que amenaza con convertir al Golfo de California en una zona de sacrificio.
El Golfo de California, conocido como el Acuario del Mundo, es hogar permanente y zona de paso del ochenta y cinco por ciento de los mamíferos marinos de México. El avance de este megaproyecto implica el desplazamiento forzado y la muerte de ballenas, delfines y otras especies, incluidas aquellas en peligro de extinción como la vaquita marina. El aumento masivo del tráfico de buques metaneros, el ruido submarino constante y el riesgo de colisiones hacen inevitable un daño grave e irreversible. Autorizar esta infraestructura equivale a aceptar de manera consciente la destrucción de uno de los ecosistemas marinos más valiosos del planeta.
A la devastación ambiental se suma la crisis climática. El gas natural licuado no es energía limpia, es gas fósil. Su extracción, licuefacción y transporte liberan grandes cantidades de metano, uno de los gases de efecto invernadero más dañinos. Transportar este gas por territorio mexicano profundiza una crisis que ya golpea a comunidades enteras con sequías, escasez de agua y eventos climáticos extremos. Defender este modelo energético es defender el agravamiento deliberado de esta emergencia.
La forma en que el proyecto ha sido impulsado por el oficialismo refuerza aún más su ilegitimidad. Ha avanzado mediante procesos opacos, evaluaciones ambientales cuestionadas y sin una consulta real a las comunidades locales ni a la comunidad científica independiente. La existencia de juicios de amparo y procesos judiciales confirma violaciones graves al derecho a un medio ambiente sano.
Morena, una vez más, está pasando por encima de la población y actuando contra el interés público. Esta iniciativa impulsa un modelo de desarrollo viejo, extractivo y profundamente injusto, que viola la responsabilidad legal y ética del Estado mexicano de proteger a sus ciudadanos y su patrimonio natural. Se está dando prioridad a negocios fósiles que generan daño y muerte. Persistir en este rumbo es un retroceso grave que pone en peligro el futuro del país. Al tiempo.
DETALLES. Les deseo que esta Navidad esté llena de paz, amor, esperanza y bendiciones, y que disfruten de momentos especiales junto a sus seres queridos, rodeados de alegría.
¡FELIZ NAVIDAD!
Mariana Gómez del Campo, Secretaria de Asuntos Internacionales del CEN del PAN y Presidenta de la Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA).





