Ciudad de México. En una apretada votación por la ausencia de ocho diputados de Morena y 3 del PVEM, la Comisión de Economía de la Cámara de Diputados aprobó esta tarde la reforma a la Ley de Impuestos Generales de Importación y Exportación, que implica mil 463 cambios a fracciones arancelarias de 17 sectores.
El dictamen -que se envió a la Mesa Directiva para que lo agende en la sesión ordinaria de mañana martes-, se aprobó apenas con nueve votos de Morena y uno del PVEM, mientras ocho de PAN, PRI e incluso del PT votaron en abstención, mientras una diputada de MC lo hizo en contra.
Durante la reunión de solo una hora, el presidente de la comisión, Miguel Ángel Salim (PAN), explicó que, para redactar el dictamen, y en acuerdo con la Secretaría de Economía, “se diseñó una nueva propuesta que modifica algunas de las fracciones y que fortalece la iniciativa” presidencial.
Detalló que, de las mil 463 fracciones, 391 mantienen el mismo arancel propuesto por la iniciativa del Ejecutivo.
“De las restantes mil 72, en 596 las importaciones son menores a 1.5 millones de dólares al año. Considerando lo anterior nos quedan 476 fracciones, de las cuales 321 se cuenta con proveeduría de al menos 50 por ciento de países con un tratado firmado con México, por lo que no deben representar problema alguno”.
Añadió que, ya con las modificaciones, el dictamen mantiene mil 463 fracciones y “se logra un equilibrio, tras atender las peticiones de sectores estratégicos y cámaras empresariales”.
Gloria Núñez Sánchez (MC) resaltó que no deben pasar desapercibidas las advertencias sobre el impacto de la reforma y planteó medir los efectos de gravar insumos de las cadenas de producción.
También, vigilar que no se afecte la competitividad de las exportaciones, prever si los costos se trasladarán al último consumidor y, sobre todo, tomar en cuenta las acciones de reciprocidad de terceros países.
En las intervenciones, Patricia Armendáriz (Morena) lamentó que algunos sectores quedaron fuera, a pesar de las exigencias específicas de productores mexicanos.
Citó, por ejemplo, “el problema que la libre importación de la tilapia en México tiene en los productores nacionales. Y no fue considerada. Y en otro tema, productores locales en tuberías conductoras de agua. No solo no aumentaron, sino disminuyeron y fue solicitud clara y específica con justificantes técnicas. Se tiene que proteger esta industria”.
A su vez, María Angélica Granados (PAN) resaltó que la relación con Estados Unidos y Canadá es el principal activo económico y geopolítico de México.
“Si queremos que Norteamérica sea la región más dinámica y competitiva, tenemos que blindar nuestro mercado de la triangulación e importaciones que entran por la puerta trasera para aprovechar indebidamente el TMEC”, indicó.
Refirió que la reforma “se concentra en fracciones de 17 sectores que representan alrededor de 50 mil millones de dólares de importaciones, 8.6 por ciento del total, es decir no estamos tocando todo el comercio exterior, vamos al segmento donde la competencia desleal ha afectado con más fuerza la industria nacional”.
Expuso que más de 75 por ciento de las importaciones en las fracciones modificadas provienen de países sin tratado comercial y 57.6 por ciento de todas las compras son solo de China.
“México tiene un déficit global de más de 18 mil millones de dólares y solo con China el saldo negativo es de 119 mil 500 millones de dólares.
Este dictamen es una respuesta directa a esa asimetría, y a la que se ponen barreras a subsidios subvaluación y dumping que desplazan producción nacional”, resaltó.
Informó que, con los cambios, los aranceles a aplicar “quedan por encima de los vigentes, de manera destacada en autos ligeros, papel, cartón y juguetes, textiles y electrodomésticos”.











