El senador sonorense Heriberto Aguilar Castillo afirmó que el Paquete Económico 2026 consolida el bienestar del pueblo, al destinar más de 987 mil millones de pesos a programas sociales prioritarios, con un aumento real del 14.5 % respecto a 2025, y un incremento de 1,414 millones en el gasto federalizado para Sonora, lo que —dijo— refleja el compromiso del gobierno federal con la transparencia y la justicia social.
El senador de la República por Sonora, Heriberto Aguilar Castillo, afirmó que el Paquete Económico 2026 aprobado por el Congreso consolida el bienestar del pueblo, al destinar más de 987 mil millones de pesos a programas sociales prioritarios, un aumento real del 14.5 % respecto a 2025.
“Este presupuesto reafirma el sentido humanista de la Cuarta Transformación. Los recursos públicos ya no se quedan en manos de unos cuantos ni se diluyen en fideicomisos opacos; hoy se traducen en becas, pensiones, salud y oportunidades reales para la gente”, expresó el senador morenista.
Aguilar Castillo destacó que el gasto federalizado para Sonora, ronda los 61 mil 424 millones de pesos en 2026, de acuerdo con el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación, lo que representa 1,414 millones de pesos más que en 2025.
Entre obras estratégicas que se realizan en Sonora, resaltó que más de 1 millón 8 mil 700 sonorenses reciben apoyos sociales que representan una inversión de cerca de 20 mil millones de pesos, de acuerdo con lo informado por la presidenta Claudia Sheinbaum.
El también fundador de Morena sostuvo que el Paquete Fiscal 2026 refleja el compromiso del gobierno federal con la transparencia y la justicia social. “Cada peso del presupuesto tiene destino, tiene propósito y tiene rostro humano. No hay espacio para la corrupción ni para la nostalgia neoliberal”, enfatizó.
El senador reconoció el trabajo del gobernador Alfonso Durazo, quien impulsa obras de gran impacto social y productivo, alineadas al segundo piso de la transformación y al bienestar de las familias sonorenses.
Finalmente, Aguilar Castillo recordó que, en los gobiernos del pasado, fideicomisos y fondos se convirtieron en símbolo de corrupción y discrecionalidad.
“Mientras los gobiernos neoliberales usaban el dinero del pueblo para sus negocios personales, hoy esos recursos llegan directamente a las familias mexicanas, sin intermediarios ni moches. Esa es la diferencia entre el saqueo del pasado y la justicia social de la transformación”, concluyó.











