Es el momento ritual para el que se preparan cada día del año. Cada gira, cada palabra, cada encuentro es consignado diligentemente en las imágenes que habrán de vestir el informe de gobierno.
Es el momento del gobernador, pero detrás del ritual de menos de dos horas hay mil noches de desvelos; planificación y prisas, malpasadas y desencuentros, gritos y sombrerazos, tensiones e imponderables en la organización y la logística de la que participa un ejército de servidores públicos que cotidianamente están en sus respectivas trincheras haciendo caminar la maquinaria gubernamental por un sendero que no admite descuidos ni improvisaciones, mucho menos agandalles, so riesgo de pagar un alto precio. Que le pregunten, si no me creen, a los que han tenido que abandonar el barco en estos cuatro años, desde aquel Temo Galindo de quien nadie parece acordarse, hasta Andrea Fernanda “N” hoy tras las rejas, y su esposo, Julián Alán “N”, hoy en calidad de prófugo por delitos de peculado.
“Que lo que se ve, está hecho de cosas que no se ven”, reza una leyenda en un mural de Palacio de Gobierno donde se recrea la historia de Sonora. Quizás a eso se refiera la frase con reminiscencias bíblicas, pero que viene a cuento hoy que es el momento del gobernador, pero también de todos aquellos que lo acompañan, desde el grupo más compacto hasta quienes desempeñan las más modestas tareas en el diseño y la ejecución de las políticas públicas.
II
De entre las novedades del IV informe de gobierno de Alfonso Durazo, destacan el anuncio de la muy urgente y muy postergada ampliación a cuatro carriles, de la carretera 100 (Hermosillo-Bahía de Kino) y el formato de ese ejercicio de rendición de cuentas, apoyado en abundante material audiovisual que le permitió al jefe del Ejecutivo descansar las cuerdas vocales, que no terminan de recuperarse después de una intervención quirúrgica que tuvo hace unos meses.
Y es que no es cualquier cosa plantarse a la mitad del foro para citar la muy larga numeralia de las obras, acciones y programas desarrolladas durante los últimos doce meses y que por cierto han sido muy bien difundidas desde las oficinas que dirige Paloma Terán, coordinadora del Sistema de Comunicación Social.
Como indica el protocolo, el gobernador estuvo antes en el Congreso del Estado para entregar el formato impreso del informe, a la presidenta Virginia Espinoza y a quien encabeza la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política, la petista Jazmín Lizárraga, en un evento atestiguado por una representación plural de la Cámara: Ernestina Castro (Morena), Iris Fernanda Sánchez Chiu (PRI), Ana Gabriela Tapia (PRD) y Alejandra López Noriega (independiente); Fermín Trujillo (NAS), Norberto Barraza (PES), David Figueroa (PVEM) y Raúl González de la Vega (independiente).
III
A un costado del Auditorio Cívico se instalaron carpas, sillas y enfriadores de aire para mitigar el verano que no termina de irse y permitir a cientos de invitados al informe, que por cierto fue el más visto en la historia de estos eventos: fue tendencia en X y alcanzó miles de reproducciones en las primeras dos horas en plataformas como Facebook y YouTube; en más de 40 municipios se habilitaron espacios públicos como plazas, salones y auditorios para que los ciudadanos lo atestiguaran.
Dentro del Auditorio Cívico, la nueva clase política en pleno. Muchísimas caras nuevas que ilustran el desplazamiento de la anterior hegemonía, muy brillante hoy por su ausencia. Son nuevos tiempos, sin duda. Senador@s, diputad@s federales, locales, alcaldes y alcaldesas, regidor@s, todos del nuevo bloque gobernante. Desde luego el gabinete legal y ampliado cuyos personeros se placean a contentillo buscando las cámaras y los micrófonos; la foto y la entrevista, el saludo y el abrazo que consigne su presencia por lo que se ofrezca más adelante, cuando venga el tiempo de las pizcas electorales.
Y allá en la mitad del foro, el gobernador tiene un mensaje para ellos y ellas: pónganse a chambear, porque nada es más redituable que la confirmación de los resultados de un buen trabajo. El que tenga ojos que vea, y el que tenga oídos que oiga.
Hacer aquí el recuento de lo informado sería redundar sobre lo muy publicitado: presupuesto social histórico, Plan Sonora de Energías Sostenibles, carreteras, puertos y aeropuertos, becas estudiantiles; más de 20 mil millones de pesos en programas sociales; plan hídrico para enfrentar la sequía, malecones en Guaymas, San Carlos, Empalme, Huatabampito y Puerto Peñasco para detonar económicamente esos destinos turísticos. La danza de los millones en materia de salud, seguridad, educación, economía, combate a la pobreza…
En la primera fila, el secretario federal de Economía, Marcelo Ebrard Casaubón, representante de la presidenta Claudia Sheinbaum escucha atento y recibe el calorcito y agradecimiento del gobernador por su invaluable apoyo a los proyectos del Plan Sonora. No es, para mi gusto, el mejor enviado presidencial, considerando una vieja historia de desencuentros con el gobernador allá por los años 90, cuando uno era el brazo derecho de Luis Donaldo Colosio y el otro lo era de Manuel Camacho, pero esa es otra historia.
Y en el cierre de su informe, el gobernador manda varias señales. Reitera el llamado a su tropa para que ponderen el trabajo con resultados y no se distraigan en campañas anticipadas y, en medio del fuego graneado del que ha sido objeto en los últimos días, lo dice claro: “No soy de los que se pandean”.
Y para subrayarlo, termina el evento llamando a su familia a acompañarlo allí, en el escenario del Auditorio Cívico; su esposa Rocío Chávez, su hija María del Mar y su hijo Alfonso, que le corresponde con un beso en la mejilla.
II
Y si de informes hablamos, hay que estar muy pendientes mañana martes del que rendirá el alcalde de Hermosillo, Antonio Astiazarán, especialmente aquellos maledicentes que le apuestan a la ruptura con el palacio de enseguida, algo que se ve lejano si consideramos que El Toño no solo estuvo entre los invitados especiales de Alfonso Durazo, sino que se aplicó en el reconocimiento al trabajo del gobernador, especialmente en lo que concierne a las obras que desde el gobierno del estado se están llevando a cabo para cambiarle el rostro al centro histórico de Hermosillo.
El informe del alcalde capitalino será el martes 16 de septiembre a las cinco de la tarde en Palacio Municipal, y el viernes 19 echará la casa por la ventana para su correspondiente ejercicio de rendición de cuentas en el Expo Forum a las diez de la mañana.
Desde luego hay que asistir porque también habrá mucha ‘carnita’ en materia de esa grilla que les encanta a los amarranavajas lectores y las encampañadas lectoras.
Será bien interesante este informe, porque el Congreso de mayoría morenista le bateó su paquete fiscal y lo obligó a operar con el presupuesto del año pasado. Pero como el Toño tampoco es de los que se doblan, le metió creatividad al asunto y no solo sorteó las dificultades de ese hecho, sino que puso el ejemplo a otros alcaldes de lo que se puede hacer con un adecuado manejo de la gobernanza en materia de finanzas propias.
Por cierto, acompañado de su esposa Patricia Ruibal, el alcalde entregó constancias de apoyo por un millón 800 mil pesos a 25 organizaciones de la sociedad civil que ganaron en la cuarta convocatoria del programa Peso Solar, con el que se financian paneles solares bajo un esquema de coinversión mediante el cual ya se estarán concretando 25 proyectos de eficiencia energética.
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