La estrategia en 2026 seguirá centrada en la recaudación fiscal a través de dos estrategias y el avance en reducir la deuda de la petrolera.
Redacción
Por la tarde de este lunes Edgar Amador entregará el primer paquete presupuestal del gobierno de Claudia Sheinbaum, bajo la expectativa de que seguirá cumpliendo con la consolidación fiscal, sin dejar de lado el apoyo a Pemex y garantizar a los programas sociales.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público tiene previsto entregar el paquete económico para 2026 a las 17:00 horas en San Lázaro. Vale recordar que está compuesto por los criterios generales, que son el marco de estimaciones macroeconómicas que sustentan el proyecto de ingresos y el de egresos.
Durante su conferencia de esta mañana, la presidenta aseguró que buscan el menor déficit posible, sin ofrecer detalles de cuál será el objetivo para el próximo año. De acuerdo con los pre-criterios entregados en abril, para este se prevé que pase de un déficit cercano al 6% a 3.9%.
Sin embargo, hizo foco en que uno de los temas centrales para este presupuesto es el apoyo para reducir la deuda de Petróleos Mexicanos (Pemex), pues el próximo año enfrenta altos vencimientos de deuda por alrededor de 18 mil millones de dólares, sumado a la deuda con proveedores.
“El objetivo es que en el 2027 ya no tengamos estas cargas y vamos a seguir renegociando esta deuda para apoyar a las finanzas públicas”, dijo la presidenta, quien enfatizó que su deuda financiera se adquirió durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, sin hacer mención que la de proveedores incrementó durante la gestión de Andrés Manuel López Obrador.
La presidenta también garantizó el avance de la consolidación fiscal con la garantía de continuar con todos los programas del bienestar, es decir, apoyos como becas y pensiones a distintos grupos de la sociedad.
El paquete presupuestal enfrenta el reto de la desaceleración económica, que este año no solo se explica por el cambio de gobierno, sino también por la incertidumbre que provocaron las modificaciones a la ley en materia jurídica y el volátil entorno comercial por las políticas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
A pesar de este contexto la presidenta mantuvo su promesa de que no habrá impuestos y en cambio apuesta por aumentar la recaudación fiscal a través de dos estrategias, además de la medida anunciada la semana anterior de eliminar beneficios fiscales a bancos en el pago al IPAB (por el Fobaproa).
Una de las estrategias tiene que ver con combatir a las factureras, Sheinbaum adelantó que vendrán nuevas medidas en ese sentido; lo segundo serán modificaciones en materia aduanera. Ambas medidas, aseguró la presidenta, ayudarán a disminuir la evasión fiscal.
Los detalles finos los dejó la presidenta para que sean expuestos por el titular de Hacienda, que ofrecerá una conferencia mañana y el miércoles se presentará en Palacio Nacional.