Una jueza de Arizona sentenció a una migrante mexicana a dos años de prisión tras declararse culpable de agredir a un agente federal con un arma peligrosa.
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El incidente tuvo lugar el pasado 16 de abril en Nogales, Arizona, donde un agente de la Patrulla Fronteriza vio a una mujer cruzar el muro fronterizo y se dirigió a detenerla.
La mujer fue identificada como Sandra Meza Casillas, de 51 años, quien se tiró al suelo intentando pasar desapercibida tumbada boca abajo en una carretera paralela a la barrera internacional. Dos individuos del lado mexicano le incitaban a correr. El agente la persiguió y cuando logró alcanzarla y sujetarla del hombro, esta sacó un rociador de gas pimienta y roció al agente en la mejilla izquierda.
El agente se recuperó de esta agresión y detuvo a Meza.
Meza había sido deportada del país en 2012 y estaba intentado entrar de manera ilegal al país.
Enfrentaba una posible sentencia de hasta 20 años de prisión de ser declarada culpable, por eso mismo decidió buscar un acuerdo con la fiscalía. La jueza federal de distrito Angela M. Martinez la condenó a 24 meses de prisión y tres años de libertad supervisada – será deportada al final de su condena.
ENLACE: Sentenciaron a migrante mexicana por rociar con gas pimienta a agente