Advierte que más de tres mil empleados del banco están en riesgo de quedarse sin trabajo, mientras que miles de cuentahabientes podrían verse afectados.
Arturo Ángel / MILENIO
CIBanco presentó ante una corte federal en Estados Unidos una demanda civil en contra del Departamento del Tesoro por la decisión que adoptó en junio pasado de cortarle el acceso al sistema financiero de ese país, derivado de supuestas actividades de lavado de dinero en favor del narcotráfico.
En la demanda radicada en una corte de Washington, el banco mexicano alega que se trata de una sanción y orden ilegal, que viola el debido proceso y la presunción de inocencia, y que ha puesto a dicha institución financiera en riesgo de una “desaparición inminente” al no poderse defender adecuadamente. Por ello, solicita a la corte que suspenda, al menos temporalmente, los efectos de la sanción.
“La orden de FinCEN (la unidad de inteligencia financiera del Departamento del Tesoro) pone en riesgo la continuidad de CIBanco como banco internacional y amenaza con dejar varados más de 40 mil millones de fondos estadunidenses gestionados por el banco… sin un proceso adecuado para demostrar la falsedad de estas acusaciones, CIBanco se enfrenta a una desaparición inminente”, indicó el banco en su demanda.
El antecedente del caso se remonta al pasado 25 de junio cuando el Tesoro anunció la imposición de sanciones a través de FinCEN a tres instituciones financieras mexicanas, bajo el supuesto de que han ayudado a lavar activos de cárteles mexicanos que, además, son considerados organizaciones terroristas.
El Tesoro anunció en ese momento que como resultado de estas acciones, ninguna de las instituciones financieras tendría acceso al sistema financiero de Estados Unidos y advirtió la prohibición de realizar negocios con ellos.
En la demanda presentada en la corte de Washington, CIBanco explica que jamás recibió aviso oficial ni oportunidad para confrontar las pruebas en su contra. Asegura que la orden carece de especificidad y FinCEN se negó a compartir detalles necesarios para una defensa adecuada.
También afirma que las acusaciones son “generales y vagas” y no permiten identificar a las personas, cuentas o transacciones supuestamente relacionadas con el tráfico de opioides, ni demostrar complicidad. Pese a ello, el banco mexicano afirma que se impusieron sanciones “desmesuradas” en lugar de opciones menos severas.
Miles de afectados y millones congelados
Al continuar con su demanda, CIBanco sostiene que este procedimiento de sanción, que considera violatorio del debido proceso, ya ha causado daños importantes tanto para el propio banco como para terceros.
Por ejemplo, el banco sostiene que antes de la sanción, contaba con una asociación con Visa, mediante la cual esta aceptó proporcionar servicios clave de procesamiento para aproximadamente 220 mil tarjetas de débito y tarjetas de prepago emitidas por CIBanco. Como parte de este acuerdo, CIBanco mantenía una cuenta en Estados Unidos con Visa, a través de la cual realizaba pagos a Visa y recibía pagos de Visa. Al 25 de junio de 2025, el saldo de esta cuenta era de aproximadamente 2.7 millones de dólares.
El 30 de junio de 2025, Visa dio por terminada su relación con CIBanco con base en la orden. La terminación por parte de Visa, agrega la demanda, provocó que aproximadamente 150 mil tarjetas de prepago emitidas por CIBanco dejaran de funcionar para los clientes. Además, Visa bloqueó aproximadamente 70 mil tarjetas de débito adicionales emitidas por CIBanco para que no pudieran utilizarse en el extranjero.
Además, CIBanco explica en la demanda que cuenta con decenas de cuentas bancarias dentro de Estados Unidos en instituciones financieras estadunidenses como parte de sus responsabilidades fiduciarias, incluyendo cuentas en aproximadamente diez diferentes instituciones financieras de Estados Unidos. En total, estas cuentas fiduciarias actualmente contienen más de 38 millones dentro de Estados Unidos.
“Desde la publicación de la orden, CIBanco no ha podido acceder a muchas de estas cuentas, ya que las instituciones financieras estadunidenses han comenzado a cumplir con la orden que prohíbe la transmisión de fondos hacia y desde CIBanco. Debido a la manera en que están estructurados los fideicomisos, los beneficiarios tampoco pueden acceder directamente a ellos, lo que significa que los activos están, en efecto, varados”, señalan los abogados del banco.
Más allá de los daños a la institución financiera, los abogados de CIBanco afirman que el potencial colapso como resultado de una sanción que considera injustificada tendrá daños colaterales en miles de terceros que dependen directa o indirectamente de esta empresa.
“Las personas con depósitos en el banco enfrentan un riesgo sustancial de pérdidas en caso de liquidación. Numerosos inversionistas estadunidenses, incluidos empleados estatales y locales, como maestros y personal de emergencias, sufrirán pérdidas debido al desorden en la gestión que realiza la división fiduciaria de fondos de pensiones, fondos de inversión y otros fideicomisos, y además corren el riesgo de quedar varados sin acceso a los activos mantenidos en fideicomiso a su favor. Y muchos de los más de 3 mil empleados del banco serán despedidos cuando el banco se vea obligado a cesar sus operaciones comerciales internacionales y cerrar o reducir drásticamente sus actividades”, subraya la demanda.
¿Qué pide CI Banco al juez?
Bajo el supuesto de que la sanción emitida por el departamento del Tesoro es abusiva e ilegal, CIBanco ha pedido a la corte que, de entrada, emita una suspensión provisional y luego permanente de la orden que, a partir de septiembre, bloqueará al banco del sistema financiero de Estados Unidos.
También pide que se instruya a los demandados, o sea, al Departamento del Tesoro, para que revierta cualquier acción tomada y rescinda comunicaciones relativas a la orden.
Y finalmente, una vez analizado y resuelto el caso a su favor, CIBanco solicita una indemnización por los daños que ya ha causado esta decisión.
ENLACE: CIBanco demada al Departamento del Tesoro por sanción- Grupo Milenio