La especie solo se captura pocos meses en el Alto Golfo de California
ENSENADA.NET
La aprobación por parte del gobierno federal para arrancar un proyecto de engorda de Curvina Golfina, un pez endémico del Golfo de California, busca dar una alternativa para pescadores de la región, de una especie de temporada que en la corta ventana que puede aprovecharse reduce muy pronto su valor comercial.
Alma Rosa García Juárez Secretaria de Pesca en Baja California, recordó que no es un tema novedoso, de hecho se ha estudiado la posibilidad de establecer un programa experimental para desarrollar alevines de Curvina Golfina y de engordarlos.
Pero aclaró, solamente el gobierno federal podría autorizar este tipo de proyectos porque la Carta Nacional Pesquera en el caso de la corvina golfina, pues es muy específica cómo se captura y qué época del año.
La curvina golfina es una prima cercana de la totoaba, otro pez endémico del Golfo de California, cuya vejiga natatoria (buche)que se seca para vender, provocó que la especie se declarara en peligro de extinción y veda permanente desde 1975 en un habitat compartido con la vaquita marina sujeto por décadas a problemas de pesca ilegal.
Pero la curvina es la prima pobre, aunque también tiene buche que es incluido en las cuotas de captura de esta especie, que entre febrero y mayo se acerca a la zona del alto Golfo de California a desovar y es entonces que se captura por cientos de toneladas en cada marea, aunque la posibilidad de pesca va del 1 de septiembre al 30 de abril y el 1 de mayo inicia la veda.
Pero es una breve ventana de captura donde de acuerdo a la Secretaria de Pesca el precio inicial puede ser alto, pero al saturarse el mercado los precios a pie de playa caen y con esto el ingreso de los pescadores de la zona, algunos de las pocas comunidades nativas de la península de la etnia Cucapá.
Ante ello, explicó la funcionaria, la idea del estado, es que como una alternativa para que no se malbarate el producto en esta época porque como oferta-demanda, luego hay mucha saturación de producto, se la compran a casi nada al productor.
Empieza con un precio alto y en la tercera o cuarta marea les están pagando muy poco el kilo.
De sabor y carne suave, es fácil de cocinar o preparar de distintas maneras, la curvina acepta prácticamente todo, empanizados, empapelados, asada, cocida, en tacos, en burritos, como ceviche o tiraditos, pero solo se consigue fresca pocos meses en el año.
Entonces una opción que se analiza es capturar y engordar en jaulas especiales igual que el atún y otras especies.
Dijo: “si logramos conservar parte de esa marea, de esa especie y tenerlas en una engorda y darles alimento como es el caso del atún, podríamos tener esta especie más tiempo viva para que se esté cosechando y se esté vendiendo”.
Se tiene avanzado el proceso para lograrlo, ya que se hace con otras especies incluso con la prima de la curvina, la totoaba.
“ ya se demostró porque ya lo hicieron con la totoaba y ya está desarrollado, el cultivo, la biotecnología ya se hizo. Entonces estos animales comen lo misma que una totoaba. Entonces sería darles el mismo alimento que se les da a las totoabas que están en cautiverio, las que se cultivan. Prácticamente sería trasladar la tecnología que ya se tiene con la totoaba a la curvina golfina”.
El tema se ha planteado a los pescadores a los representantes de las tres cooperativas y los cucapás y lo ven viable.
“De hecho a los cucapás les gustaría incluso de poder tener un encierro, pero todavía ahí sí tendrían que entrar los expertos para evaluar que precisamente la zona que están ellos del desemboque del Río Colorado sí podría tenerse una jaula. Porque para tener la jaula tiene que ver mucho a la física del mar”
Sin embargo un poco más al sur en San Felipe, que ya se ha tenido los encierros y las engordas de Totoaba, pues ya ahí sí podría llevarse a cabo.
Aunque los permisos de la Cucapán, de la Corvina Golfina, ellos tienen sitio de embarque hasta puertecitos.
En la temporada 2025, que recientemente concluyó, el Instituto Mexicano de Investigación en Pesca y Acuacultura Sustentables (IMIPAS) autorizó un volumen de captura permisible total de curvina golfina (Cynoscion othonopterus) de 3,542 toneladas de peso entero, equivalentes a 2,953 toneladas de peso eviscerado y a 62 toneladas de vejiga natatoria (“buche”).