Natanael Cano publicó una historia en Instagram en la que critica a quienes buscan censurar los corridos tumbados; minutos después borró la publicación.
Gustavo Alonso
El cantante sonorense Natanael Cano, uno de los principales exponentes de los llamados corridos tumbados, compartió una historia en su cuenta oficial de Instagram en la que lanza un mensaje de inconformidad ante la situación actual de México y las críticas hacia su estilo musical.
La publicación incluye una imagen intervenida de un retrato suyo con lágrimas de sangre dibujadas digitalmente, acompañada de un mensaje que ha generado diversas reacciones entre sus seguidores y detractores.
“San nata llorando sangre / Por ver cómo México va de mal en peor”, comienza el texto.
La frase hace alusión a una imagen de carácter simbólico-religioso, en la que Cano se presenta como un mártir de la música popular contemporánea.
En el mensaje, el artista lamenta lo que considera un intento de censurar su obra y la de otros jóvenes intérpretes del mismo género.
“Y quieren tapar el sol con un dedo”, escribe, sugiriendo que las críticas hacia los corridos tumbados ignoran la realidad social que representa este tipo de música.
Los corridos tumbados son una vertiente del regional mexicano que fusiona elementos del trap y el hip hop con el corrido tradicional. Desde su irrupción en la industria, han generado opiniones encontradas debido a sus temáticas, que en ocasiones abordan el consumo de drogas, la vida de lujos o referencias a actividades ilícitas.
A pesar de las controversias, el género ha ganado popularidad especialmente entre los jóvenes, tanto en México como en Estados Unidos.
En su mensaje, Cano también señala que lo que más le preocupa es el respaldo que reciben quienes intentan censurar o criticar este movimiento.
“Lo peor es que hay gente que los apoya / Cegados por el odio y la envidia / Hacia jóvenes que solo buscaban salir adelante…”, escribió.
El intérprete de temas como Amor tumbado y Soy el Diablo ha sido objeto de múltiples debates en medios de comunicación y redes sociales.
Mientras algunos sectores lo ven como una figura disruptiva que representa una nueva expresión cultural de los jóvenes, otros lo consideran un promotor de mensajes problemáticos.
En repetidas ocasiones, Cano ha defendido su trabajo como una forma legítima de narrar realidades sociales desde su propia vivencia.
“En la misma publicación, el cantante aclara: “No estoy de ningún bando / Y como dice nata / ME VALE VERGA”, en lo que parece una declaración de independencia respecto a posturas políticas o ideológicas, así como un gesto de desinterés ante la controversia que lo rodea.
Hasta el momento, Natanael Cano no ha emitido un comunicado oficial ni ha ampliado su postura en otras plataformas. Sin embargo, la historia publicada se volvió viral en redes sociales y fue replicada por seguidores y medios especializados en música urbana y regional mexicana.