La presidenta Claudia Sheinbaum anunció en su conferencia matutina del viernes 28 de marzo que su administración está implementando diversas estrategias para frenar el alza del precio de la tortilla
Xóchitl Montero / MUNICIPIOS PUEBLA
El precio del kilo de tortilla, un básico en la alimentación de los mexicanos, ha experimentado incrementos considerables en varias entidades del país en los últimos meses. Este aumento ha generado preocupación entre los consumidores, quienes se han visto afectados por la subida en los precios de este alimento esencial, sobre todo en estados como Baja California y Sonora, donde los precios superan los 30 pesos por kilo.
En respuesta a esta situación, la presidenta Claudia Sheinbaum anunció en su conferencia matutina del viernes 28 de marzo que su administración está implementando diversas estrategias para frenar el alza del precio de la tortilla, y así aliviar el impacto en los bolsillos de las familias mexicanas. Según la mandataria, el Gobierno federal ha estado en conversaciones con empresas harineras, nixtamaleras y tortillerías para explorar soluciones que permitan bajar los costos sin afectar a los productores.
Uno de los objetivos, según Sheinbaum, es lograr una mejor conexión entre los productores pequeños y los consumidores, garantizando precios más accesibles y fortaleciendo la cadena de suministro del maíz.
Precios de la tortilla en varias entidades
De acuerdo con el Sistema Nacional de Información e Integración de Mercados, actualizado al 26 de marzo de 2025, los precios del kilo de tortilla varían considerablemente entre los estados. En Mexicali, Baja California, por ejemplo, el kilo de tortilla alcanza los 31.71 pesos, mientras que en Puebla, uno de los estados con el precio más bajo, se vende en 15.60 pesos. Entre otros precios destacados se encuentran Sonora con 31.33 pesos, Coahuila y Colima, donde el costo es de 30 pesos, y Oaxaca con un precio de 23.67 pesos.
Este panorama desigual en los costos refleja las disparidades regionales y las diferencias en la producción y distribución de la masa. Mientras tanto, las tortillas industriales, que se venden en supermercados, tienden a ser más baratas debido a que utilizan harina de maíz, a diferencia de las tradicionales, que son elaboradas con nixtamal y requieren un proceso más laborioso, lo que eleva su precio.
¿Qué está haciendo el Gobierno para solucionar el problema?
Para intentar frenar el continuo aumento del precio de la tortilla, el Gobierno de México ha lanzado el programa “Cosechando Soberanía”, que proporcionará créditos a productores para aumentar la producción de maíz en el país. Esta medida busca fortalecer la autosuficiencia alimentaria y reducir la dependencia de las importaciones de maíz amarillo, especialmente de los Estados Unidos, y promover la producción de maíz blanco, que es el principal insumo para la tortilla.
Este programa es parte de la iniciativa “Sin Maíz No Hay País”, que tiene como objetivo garantizar que México no solo conserve su cultura alimentaria, sino que también sea autosuficiente en la producción de este grano básico. A través de este esfuerzo, el gobierno espera aliviar la presión sobre los consumidores y estabilizar los precios a largo plazo.
Casos virales y preocupaciones en redes sociales
El alza en el precio de la tortilla ha sido tema de debate en redes sociales, donde incluso se ha viralizado un caso en Mexicali relacionado con la tortillería “La Bochita”. Este establecimiento fue denunciado por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) por vender el kilo de tortilla hasta en 30 pesos, aunque recientemente la tienda redujo su precio a 27 pesos tras la intervención de las autoridades. Sin embargo, los clientes reportaron que el precio volvió a subir, lo que ha generado más inquietud sobre los controles de precio y la regulación del mercado.
Por otro lado, Sheinbaum destacó que este tipo de aumentos se deben en parte a las condiciones del mercado y a los costos de producción, que han variado por factores como el precio del maíz, el transporte y los costos de energía.
Con el lanzamiento del programa “Cosechando Soberanía” y las políticas para fortalecer la producción interna, el gobierno promete seguir trabajando para estabilizar los precios de la tortilla. Sin embargo, los consumidores deberán estar atentos a los próximos anuncios, ya que el impacto de estas medidas podría tomar tiempo en reflejarse en los precios finales.