Existe el peligro de que delincuentes impongan a juzgadores en la próxima elección judicial, de acuerdo con el mapa del Programa de Seguridad de México Evalúa
Redacción
A casi dos meses de que se celebren las elecciones del Poder Judicial de la Federación a nivel local en 19 estados, ocho son considerados con niveles de “muy alto riesgo” y “alto riesgo” por la injerencia que podría tener el crimen organizado con los candidatos, quienes enfrentarían amenazas, coacción,ataques armados e incluso asesinatos.
De acuerdo con el mapa de riesgos generado por el Programa de Seguridad de México Evalúa, en ocho entidades existe el riesgo de que el crimen logre imponer juzgadores, ampliando su nivel de impunidad.
Los estados con riesgo alto y muy alto de presentar ataques son: Baja California, Chihuahua, Colima, Michoacán, Tamaulipas, Veracruz, Tabasco y Quintana Roo.
(24/03/2025) Fuente: Elaboración propia con información de México Evalúa.
Además de tomar en cuenta la presencia del crimen organizado, en dichas entidades México Evalúa analizó ataques y asesinatos a candidatos durante el proceso electoral del año pasado, así como la cantidad de cargos judiciales que a nivel local se renovarán.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Armando Vargas, coordinador del Programa de Seguridad de México Evalúa, dijo que, a pesar de encontrar esos focos rojos, es muy probable que en todos los estados del país se vean agresiones que pongan en riesgo la autonomía y libertad de los candidatos.
“La explicación de esa probabilidad es que las elecciones en México se han convertido en un medio para que poderes fácticos, sobre todo el crimen organizado, coloquen sus intereses desde el proceso electoral y, considerando que es la primera vez que habrá elecciones en el Poder Judicial, por supuesto que es muy tentadora la oportunidad de neutralizar todos los contrapesos y obtener impunidad”, señaló.
Pese a que en todo el país se elegirán cargos federales al Poder Judicial, el Programa de Seguridad de México Evalúa tomó en cuenta las siguientes variables para determinar en qué estados podría haber mayor intención del crimen organizado para incidir en la elección judicial: más de 50% de cargos judiciales locales en disputa; disputas violentas entre grupos criminales en el estado; explotación de las economías locales (extorsión, amenazas, cobro de piso) y alto nivel de violencia político-electoral en las elecciones de 2024.
En el ejercicio no se enfocaron en cargos a nivel federal como ministros, jueces y magistrados porque consideran que el crimen organizado podría tener menos interés, por su relevancia política y mediática.
Muy alto riesgo: Baja California
Baja California es el estado que el mapa de riesgos de México Evalúa tiene identificado como el mayor foco rojo para la elección judicial.
Pese a no haber muchos enfrentamientos en el estado, sí es uno de los que renovarán 100% de los cargos judiciales a nivel local y es también donde más ataques contra candidatos se registraron en 2024.
Tan sólo en el proceso electoral 2023-2024, Baja California registró 92 agresiones a políticos, candidatos, sus familiares y fuerzas de seguridad a cargo del proceso e instalaciones como sedes locales de partidos políticos o casas de campaña. Baja California, aclara Armando Vargas, se caracteriza por las disputas entre cárteles en zonas como Mexicali, Tecate y Tijuana; destaca también el nivel de explotación de las economías locales que mantienen el Cártel de Sinaloa, el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el Cártel de Tijuana.
La extorsión, el cobro de piso y el creciente tráfico de personas migrantes, además de los niveles siempre altos de tráfico de drogas que maneja la entidad, la hacen el escenario más probable para que grupos criminales busquen imponer sus intereses en la elección judicial.
El control del Poder Judicial en la zona podría estar relacionado con la influencia que también se disputan esas tres organizaciones de las aduanas y los pasos a California, Estados Unidos.
Alto riesgo en siete estados
Chihuahua, Colima, Michoacán, Tamaulipas, Veracruz, Tabasco y Quintana Roo tienen una particularidad: altos niveles de violencia en las acciones que ejerce el crimen organizado en esos lugares.
Además, en estas entidades se van a elegir 50% o más de los cargos a nivel local del Poder Judicial.
Destacan Veracruz y Michoacán, mismos que tuvieron el mayor número de eventos violentos en el proceso electoral 2023-2024 y ahora elegirán juzgadores, de acuerdo con los datos en los que México Evalúa basó su estadística. La información de México Evalúa demuestra que la elección del año pasado fue en la que se registraron más víctimas de violencia política-electoral, con 656 personas e instalaciones atacadas. Entre esos se contabilizaron amenazas y ataques directos a familiares de candidatos, miembros de partidos políticos, a los aspirantes y fuerzas de seguridad.
Destaca, en ese tenor, el aumento de hechos violentos en Tabasco, que desde octubre de 2024 no ha vivido tregua en algunas ciudades, especialmente en Villahermosa, con ataques cometidos por presuntos miembros de cárteles.
Los estados del golfo de México, como Tabasco, Veracruz y Tamaulipas podrían presentar ataques relacionados con la disputa de cárteles locales y su afán por lograr impunidad ante delitos como la trata de personas y el tráfico de especies marinas, puntualiza.
Entre las organizaciones que disputarían el control de jueces en ese territorio están el Cártel del Noreste (antes Los Zetas), el Cártel de Caborca, el Cártel del Golfo, La Barredora y facciones del Cártel Jalisco Nueva Generación.
La “paz narca” y el riesgo medio
Para Armando Vargas, coordinador del Programa de Seguridad de México Evalúa, la ausencia de hechos violentos no es lo mismo que la ausencia de cárteles y, por lo tanto, la ausencia de intereses del crimen organizado a nivel político y judicial.
“Sino que más bien ya es probable que existan hegemonías criminales, como ocurre en el caso de San Luis Potosí. Un ejemplo es Sinaloa: en la elección pasada no hubo mucha violencia porque el Cártel de Sinaloa tenía una hegemonía importante, pero si hoy hubiera elecciones judiciales, estaría en un riesgo alto”, precisó.
Los estados con un riesgo medio de ataques y hechos violentos en el proceso de elección judicial son precisamente San Luis Potosí, Zacatecas, Nayarit, Sonora, el Estado de México, Tlaxcala, así como la Ciudad de México.
“San Luis Potosí no tiene un antecedente alto de violencia política y tampoco vive grandes violencias diarias. Hay una hegemonía del Cártel Jalisco Nueva Generación que mete en cintura al resto de los cárteles, y parece que hay zonas donde la colusión con algunas autoridades permite que no sea necesaria la captura del Poder Judicial”, consideró.
Sobre la Ciudad de México, a pesar de que hasta hace tiempo se veía un panorama menos álgido entre la disputa de agrupaciones criminales, los datos muestran un “proceso de reorganización” tras la entrada de nuevos grupos.
“Hay disputas entre La Unión Tepito y los cárteles Anti-Unión por la presencia del Cártel Jalisco Nueva Generación y posibles alianzas, pero también hay otras violencias generadas por organizaciones locales, como el Cártel de la Peralvillo, que está resistiendo mucho los embates del Tren de Aragua”.
Riesgo bajo, sólo en cuatro estados
Destacan los estados de Aguascalientes, Yucatán, Durango y Coahuila por ser los únicos que presentan un nivel bajo de riesgo de ataques e influencia del crimen organizado en la elección judicial.
“Todas las entidades tienen un nivel de riesgo y es muy probable que en todas las entidades veamos agresiones, no necesariamente asesinatos, sino ataques de cualquier tipo”, dijo Armando Vargas.
Sobre los ataques “más efectivos” en la elección de 2024, destacó las amenazas y los intentos fallidos de asesinato, que se convirtieron en ataques directos.
“Si fueron realmente efectivos para bajar una candidatura o imponer miedo, los veremos con más frecuencia en esta elección judicial”, previó el especialista.
Las omisiones anteriores pintan un panorama sombrío
Para Vargas, que el gobierno federal haya sido omiso al nivel sin precedente que registró la violencia política en el proceso electoral 2023- 2024, sumado a que pasó también sin eco entre las instituciones electorales, pinta un panorama poco favorable para la primera elección del Poder Judicial.
“No hay ningún protocolo de protección a candidatos que pueda evitar esto, y hoy nadie está discutiendo esto, nadie está poniendo sobre la mesa la violencia política que se va a vivir”, dijo.
“Hoy es muy probable que esta primera elección judicial se bañe de violencia, porque no hay ningún mecanismo institucional que se haya diseñado o que se esté contemplando para ello. Otra vez vamos sobre las rodillas”, añadió el coordinador del Programa de Seguridad de México Evalúa.