Rosa Angélica Fimbres / ENFOQUE NOTICIAS
México.- El flujo de migrantes que buscan llegar a la frontera y eventualmente lograr el “sueño americano” continúa en Sonora, en tanto que agrupaciones de ayuda a estas personas se mantienen a la expectativa ante las amenazas de deportaciones masivas en los próximos días.
Así lo señaló el presbítero y fundador del Grupo Humanitario Mateo 20,35, José Gilberto Lezama Rodríguez, quien planteó que están expectantes y en alerta ante lo que sucedería en los próximos días, pues se esperan una situación que no sería complicada, pero sí desfavorable.
El creador del comedor comunitario que opera hace 15 años en el ejido La Victoria al norte de Hermosillo en apoyo a personas en situación de migración y de calle, dijo que “siempre nos preparamos para atender a migrantes; hay movimientos del año extraordinarios en los que el flujo aumenta. Ciertamente ahora con el presidente Donald Trum el panorama es incierto”.
El también párroco de la iglesia San Luis Gonzaga que en ocasiones sirve de albergue para migrantes, planteó que la amenaza de deportaciones masivas durante la próxima administración de gobierno de Estados Unidos ha creado una sicosis en las personas migrantes que han buscado llegar a la frontera para internarse en el vecino país del norte, antes de que se aplique esta medida.
“El flujo es un poco tranquilo y eso no quiere decir que no esté pasando, ellos quieren llegar a las fronteras de Tijuana, Mexicali (Baja California) y Nogales, Sonora”, abundó.
Lezama Rodríguez, a quien también se le conoce como el “Padre verduritas” por activismo en favor de la alimentación de migrantes, dijo que en el comedor se sirven 50 un promedio de 50 comidas al día, sin embargo, en situaciones extraordinarias han llegado a brindar a entre 200 y 600 personas.
Respecto al templo San Luis Gonzaga, aclaró que no cuentan con un albergue, pero en casos de movimientos masivos de migrantes se realiza un esfuerzo y se convierte en un refugio seguro, para que no anden en la ciudad y no corran peligro.
En ese tipo de situaciones, indicó, reciben el apoyo de autoridades municipales y estatales, además de las personas que la comunidad que responden de manera muy generosa.
Reiteró que “estamos en tensa calma. Muchas veces en ese tipo de situaciones la atención y apoyo aumenta, pues no solo se trata de los que son deportados, pues algunos siguen con la intención de tratar de cumplir su sueño”.