La construcción de un túnel subterráneo de tres kilómetros ha impactado en unas 400 viviendas y en decenas de negocios del centro y de cuatro colonia
Cecilia Reynoso / LATINUS
En Nogales viven con miedo e incertidumbre desde hace casi un año, cuando la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) comenzó a perforar un túnel de tres kilómetros que pasará por debajo de la ciudad, y que es parte de un proyecto ferroviario que busca enlazar la frontera con Estados Unidos y el puerto de Guaymas.
Habitantes de Nogales entrevistados por Latinus explican que las explosiones están dañando sus casas y han alterado su tranquilidad. La construcción del túnel a cargo del Ejército tiene un impacto directo en unas 400 viviendas y en decenas de negocios del centro y de cuatro colonias.
En los 11 meses que lleva la obra, ni las autoridades federales ni las del estado de Sonora les han informado con claridad los avances ni cuándo finalizarán las explosiones, que desde octubre son más fuertes.
El túnel es parte del proyecto conocido como “Tren Fantasma” debido a la opacidad y a la secrecía con la que construyen 63 kilómetros de vías que pasarán por los municipios de Ímuris, La Cruz y Nogales.