Se cumplen dos años del atentado que sobreviví el 15 de diciembre de 2022. ¿Qué ha pasado? Catorce personas de la “célula de ejecución” fueron encarceladas, ocho hombres, seis mujeres. Cuatro de las mujeres salieron ya de prisión por la vía del juicio abreviado, sentenciadas por asociación delictuosa. Una sigue presa por acusaciones que no tienen que ver con lo mío. La otra optó por ir al juicio oral. Cinco hombres acusados de tentativa de homicidio, entre ellos el tirador, El Bart, pidieron también el juicio abreviado, que a grandes rasgos consiste en reconocer la culpa a cambio de recibir la pena mínima de ley. El paro de jueces y trabajadores pausó ese proceso. Dos no lo han solicitado. El octavo, Armando Escárcega, El Patrón, el jefe de la “célula”, declaró por fin el 14 de noviembre. Como víctima pude leer el contenido de su declaración. Sólo porque es lo mejor para el desarrollo del caso, lo reservo por lo pronto. Sólo diré que no soy optimista en cuanto a que con él se logre avanzar mayormente. Dos años, agradezco a mis abogados (los tres Javieres, Coello Trejo, Coello Zuarth, Esquinca) y a la FGR (en especial al fiscal Ricardo Sánchez y su equipo). Dos años, no sé quién me mandó matar, no sé por qué.