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En su discurso inaugural como presidenta de México, Claudia Sheinbaum, reiteró el martes su compromiso de consolidar el Plan Sonora, que impulsará las energías renovables ampliando la generación eléctrica solar y reforzando las cadenas productivas de litio, cobre, semiconductores y electromovilidad.
El plan fue promovido por su predecesor, Andrés Manuel López Obrador.
Sheinbaum anunció su intención de implementarlo en su mandato de seis años frente a miles de ciudadanos en la plaza de la Constitución en Ciudad de México.
“Vamos a impulsar las energías renovables. El objetivo es que en 2030 tengan una participación del 45%. Vamos a impulsar un programa de paneles fotovoltaicos [en ciudades del norte] para que tengan en su vivienda paneles de energía solar, ayuden al medioambiente y disminuyan su tarifa”, señaló.
Si bien Sheinbaum ya se había comprometido a dar continuidad a los proyectos federales en Sonora, al reafirmarlos en su primer discurso público como jefa de Estado garantiza el apoyo del gobernador Alfonso Durazo, también en el sector infraestructura.
“Pondremos en marcha la producción del litio con desarrollo tecnológico propio. Las soluciones tecnológicas de todo el gobierno serán hechas en casa por jóvenes profesionistas mexicanos y mexicanas”, aseguró Sheinbaum, pese a que en el Congreso actualmente avanza una iniciativa de reforma constitucional que prohibiría la minería a cielo abierto, principal método de explotación de litio y cobre
También anunció la producción en masa de un vehículo eléctrico.
“Vamos a lanzar el Programa de Desarrollo Tecnológico para la Innovación. Les doy algunos ejemplos que ya hemos estado trabajando: produciremos el Olinia, que significa ‘moverse’ en náhuatl, un pequeño auto de acceso popular 100% eléctrico, 100% diseñado por jóvenes mexicanos y mexicanas, y ensamblado totalmente en nuestro país”, señaló.
La mandataria también prometió apoyar a los trabajadores de la siderúrgica Altos Hornos de México (Ahmsa) en Coahuila para que recuperen sus fuentes de trabajo. La compañía se declaró en quiebra en agosto, pero sus actividades permanecen suspendidas desde fines de 2022.
Por otra parte, anunció que continuará con el plan integral de rescate y justicia para los familiares de las tragedias mineras de El Pinabete y Pasta de Conchos. En 2006, 63 trabajadores perecieron en Pasta de Conchos luego de quedar atrapados bajo tierra en una antigua operación carbonífera de Grupo México en Coahuila, en uno de los peores accidentes mineros de la historia de México.
