Aunque no se han recibido notificaciones oficiales del gobierno federal, se mantienen alertas ante posibles reacomodos en las organizaciones criminales.
MILENIO
No hubo cambios en las estrategias de seguridad en el norte de Sonora tras la captura de Ismael Mayo Zambada y Joaquín Guzmán López, a pesar del posible “efecto cucaracha” o de los hechos violentos que pudieran surgir debido a los próximos reacomodos en las organizaciones criminales.
Así lo confirmó el alcalde de la ciudad fronteriza de Nogales, Juan Francisco Gim, al ser cuestionado sobre si había alguna notificación o alerta ordenada por el gobierno del Estado para los municipios con una fuerte presencia de células criminales a las que pertenecían los capos asegurados ayer por las autoridades estadunidenses.
“Hasta ahora, no hay ningún aviso, pero nosotros tenemos que seguir trabajando ante cualquier situación y no voy a esperar que algo pase, vamos a preguntar si hay alguna estrategia para estar prevenidos, es mi responsabilidad”, dijo.
Por su parte, y en relación con la detención realizada en Estados Unidos de los presuntos criminales Ismael Zambada García y Joaquín Guzmán López, hasta el momento la Secretaría de Seguridad Pública en Sonora no ha sido notificada por parte del gobierno federal sobre este hecho, informó Víctor Hugo Enríquez García, titular de la Secretaría de Seguridad Pública en Sonora.
Además, resaltó que las autoridades de seguridad del Gobierno de Sonora se encontraban en total disposición para coordinarse con las autoridades correspondientes.
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