Esta columna será de color verde. No para que se la fumen. Pero sí para que generemos conciencia
Fernanda Tapia
Esta columna será de color verde. No para que se la fumen. Pero sí para que generemos conciencia. Estamos a una semana de qué empecemos a consumir 75% de un planeta extra. Esto que acabo de decir, me hace quedar como si estuviese en drogas, pero recordemos que Lo lógico sería dejar que el planeta tierra, produjera, se sanara y que nosotros sólo consumiéramos lo que nos toca de este planeta durante un año.
Ahora resulta que nos acabamos lo que produce durante un año a finales de julio y el resto de los meses rumbo a diciembre. Estamos consumiendo un planeta que no tenemos . Casi casi es como vivir de prestado y no dar tiempo al planeta para que respire. Vivimos como si tuviéramos 1,75 planetas, aunque según los expertos, la fórmula para la salud del planeta se basa en consumir menos de lo que la naturaleza puede regenerar.
Parecieran peleadas pero la economía y la ecología deben trabajar juntas para evitar la destrucción del planeta. Ixia, a esto le agregamos deudas eternas como la contaminación del Río Sonora, todos deberíamos de presionar por una solución, aunque no vivamos ni remotamente cerca.
Tuve la oportunidad de platicar con Martha Patricia Velarde, integrante de los Comités de la Cuenca y las comunidades afectadas desde hace 10 años por la contaminación de una mina (que supuestamente ya no operaba) del grupo MEXICO. “Fue en 2014, cuando ocurrió el derrame de 40 millones de litros de solución atribulada de cobre, con gran tonelaje de metales pesados en los ríos Bacanora y Sonora”.
La minera, propiedad del segundo hombre más rico de México, se excusó asegurando que esto había sucedido “por las lluvias anormales que se habían presentado”, pero en realidad “alguien” abrió una compuerta cuando ni siquiera había llovido. Y Martha continúa: “Al parecer les fallaron las válvulas. No avisaron del problema hasta dos días después, provocando que se contaminaran tierras, pozos de agua de consumo humano y las consecuencias aún las estamos sufriendo.
El medio ambiente sufrió daños gravísimos que aún continúan sin reponerse. Los polinizadores, por ejemplo, que son tan vitales para para los cultivos, para la reforestación de las de las áreas ecológicas, han huído. Todo dió un vuelco de 180 grados. Nos cambió totalmente la vida. Ahorita estamos sufriendo enfermedad, muerte de las personas, ya que además no se cumplió con la remediación ni ambiental y mucho menos a la población.
No se les dió la gana seguir brindando la atención médica. No cumplieron con la instalación de plantas potabilizadoras y todo esto con la complacencia, pues del gobierno en turno”. Es decir, Peña Nieto no hizo nada y aunque han ganado diversas instancias judiciales, la minera sigue ignorando la sentencias.
Ahora estos comités de la Cuenca buscan a la Dra SHEIN Band para ver si ella puede lograr justicia. Algo así como mi Jaguar de Macuspana y los fallecidos en Pasta de Conchos.
POR: FERNANDA TAPIA
@TAPIAFERNANDA